Debido a que la Ciudad de México padece un déficit de 600 mil medidores de agua, el Gobierno del Distrito Federal (GDF) ya alista una inversión de 60 millones de pesos a mediados de año para enfrentar el rezago.

 

“Tenemos un millón 400 mil medidores de alrededor de dos millones de cuentas, es decir que tenemos un déficit de instalación del orden de 600 mil”, dijo a 24 HORAS el director Ejecutivo de Servicios a Usuarios del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), Ernesto Blanco.

 

La meta es llegar a tener instalados un millón 700 mil medidores de agua, lo que representaría casi el 100%, ya que el resto no es factible de instalar debido a las condiciones del inmueble, como un edificio con toma de agua compartida, explicó el funcionario capitalino.

 

Blanco Sandoval señaló que el déficit es generalizado en las 16 delegaciones, aunque apuntó que Iztapalapa, Benito Juárez y las partes altas de Álvaro Obregón y Gustavo A. Madero son de las zonas con mayor rezago en esta materia.

 

En octubre de 2010, el Gobierno de Marcelo Ebrard adquirió 355 mil medidores de los cuales la mitad fueron para nuevas instalaciones y el resto para reposiciones; los aparatos se terminaron de entregar en septiembre del año pasado.

 

En lo que va de esta administración se han invertido 60 millones de pesos para la adquisición de 40 mil medidores que se están instalando y cambiando, pero para junio se tiene previsto lanzar una nueva licitación para la compra de otros 40 mil medidores y la inversión sería de la misma cantidad.

 

De acuerdo con el Sacmex, de los usuarios registrados, un millón 400 mil cuentan con un aparato medidor de agua, mientras que al 17% se le expide boleta por cuota fija, por lo que el porcentaje de cobro sobre el agua facturada es de 74%.

 

Por ello, indica el Sacmex en el Programa de Gestión Integral de los Recursos Hídricos Visión 2020, es necesario que el Sistema “mejore su eficiencia operativa y aumente sus ingresos, ya sea por la vía de los subsidios o por la recuperación parcial o total de sus costos con la aportación de los usuarios en función de su consumo”.

 

Actualmente las tarifas por el consumo de agua en la Ciudad de México son fijadas anualmente por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal en el Código Fiscal en función del consumo y tipo de manzana: popular, baja, media y alta.

 

En la zona alta la tarifa fija es de 624 pesos, en la media es de 364, en la baja de 144 y en la popular de 90 pesos, cantidades que son cobradas bimestralmente a los domicilios que no cuentan con un aparato medidor.

 

“Sí tenemos un problema de tarifas, a algunas personas se les hacen caras, pero la verdad es que tenemos las tarifas más bajas del país y somos de los Sistemas más complejos del mundo y tenemos consumos altos. Traer el agua a la Ciudad tiene un costo altísimo por el tipo de lugar, por la altura que tenemos”, comentó Blanco Sandoval.

 

De acuerdo con el asambleísta del PRD, Gabriel Godínez, presidente de la Comisión de Gestión Integral del Agua, la Ley Federal de Aguas que se discute en la Cámara de Diputados impactaría en un aumento de tarifas en la Ciudad de México.

 

Esto luego de que se permitiría a particulares la gestión del agua, por lo que el ajuste tarifario obedecería a los costos que tendrán que asumir las empresas para llevar agua a zonas que carecen de ella.

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