Fidel Velázquez no alcanzó a ver los cuervos de su creación.
Le volvieron la espalda quienes durante decenios lo adularon y lo llamaron forjador de instituciones mexicanas, soporte del movimiento obrero y factor de la estabilidad laboral y social del país.
El humilde hijo de agricultores de Villa Nicolás Romero y lechero durante su juventud antes de formar la CTM, fue ignorado en el 115 aniversario de su natalicio.
El 24 de abril pasó como cualquier fecha.
En la CTM, hoy manejada formalmente por Joaquín Gamboa Pascoe y en su constante ausencia por Carlos Aceves del Olmo, no hubo ceremonia ni mención a esta efeméride.
Al contrario, el aniversario fue precedido por una ceremonia de marginación: del patio de la añosa central fueron retirados los bustos de Fidel Velázquez y de Leonardo Rodríguez Alcaine para colocar en su lugar la estatua con aires juveniles de Joaquín Gamboa Pascoe.
En realidad, un monumento al lagoteo de Hugo Díaz, dirigente de trabajadores de Chrysler y quien aspira a convertirse primero en sucesor de aquél.
Eso sí, colocaron una leyenda de antología:
“El objeto de este reconocimiento es resaltar los altos valores de la CTM, en beneficio de los trabajadores, siendo reconocida por propios y extraños”.
LUCHA POR SUCEDER A GAMBOA PASCOE
El silencio ominoso de la ocasión se explica por la traición.
Pero también por otras circunstancias.
Joaquín Gamboa Pascoe ya encendió la maquinaria para su reelección indefinida el año próximo, cuando tendrá 94 años y tal vez mayores problemas físicos.
No debe tener dificultad para prolongarse en el cargo.
Donde sí podría tener algún problema es en relevar a Carlos Aceves del Olmo como secretario general sustituto para colocar a Hugo Díaz, quien le aporta camionetas de lujo blindadas y guardias personales.
El Día del Trabajo encontrará a los cetemistas en semejante reacomodo.
¿Cómo lo celebrarán?
Pues como ordene la Presidencia de la República, tal vez un acto protocolario en la residencia de Los Pinos, discursos huecos sobre libertad sindical y elogios a la reforma laboral.
Del desfile ni hablamos.
Si suspendió el congreso anual de la CTM para analizar la situación del país y la crisis obrera –sólo 35% de los trabajadores cuenta con seguridad social, señaló ayer el secretario Alfonso Navarrete Prida–, ¿qué importancia puede tener el 1 de mayo?
No se vaya a enojar el gobierno.
CRISIS EN EL CENTRO DE ESTUDIOS DEL CT
1.- Recientemente fue cerrada la Universidad Obrera, en su momento orgullo del ex dirigente cetemista Fidel Velázquez.
Otra institución académica del movimiento obrero, el Centro de Estudios del Congreso del Trabajo, enfrenta circunstancias muy difíciles.
Sus 28 trabajadores no han recibido su salario desde hace dos meses, las instalaciones se encuentran deterioradas y su director Benjamín Ruiz Rodríguez acude rara vez y no en horario de labores.
Es otra cara de la crisis del movimiento obrero institucional.
2.- Ayer se celebró el Foro Estatal por una Estrategia Digital en Nuevo León a convocatoria de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnología de la Información.
A este objetivo de reforzar la agenda digital nacional contribuyeron los candidatos a gobernadores de ese estado y se pretende reproducir esta estrategia en las ocho entidades donde se renovarán las gubernaturas.
Y 3.- Pemex entregó recursos para ampliar las becas de la Fundación UNAM.
En el acto, su presidente Dionisio Meade agradeció el apoyo a Emilio Lozoya y destacó: “Es imposible entender el México moderno sin la contribución de la Universidad y de Petróleos Mexicanos, que aporta la tercera parte de los recursos federales”.