SANTIAGO, Chile.El servicio geológico chileno informó el lunes que el volcán Calbuco exhibe un incremento significativo de la sismicidad similar a la exhibida poco antes de la última erupción hace cuatro días por lo que no descarta un “nuevo pulso eruptivo en el corto plazo”.
El Servicio Nacional de Minería y Geología sugirió mantener la exclusión de 20 kilómetros en torno al volcán, ubicado en la región de Los Lagos, mil kilómetros al sur de Chile, y que entró sorpresivamente en erupción el 22 de abril. Desde entonces ha registrado tres pulsos eruptivos que han lanzado unas 120 toneladas de cenizas, y mantienen a unas 6 mil 500 personas evacuadas, que sólo pueden regresar algunas horas diarias a sus hogares, donde permanecen sus animales domésticos.
El servicio geológico agregó en su último informe que los fragmentos sólidos de material volcánico inestables acumulados en la cima del volcán, en sus laderas y en sectores aledaños, “podrían ser removilizados por lluvia”, originando peligrosos aluviones a lo largo de los ríos aledaños. “Se sugiere prestar especial atención a la ocurrencia de estos fenómenos debido al pronóstico de lluvias durante los próximos días”, apuntó.
“Las condiciones actuales sugieren que la generación de columnas eruptivas con alturas mayores a 15 km s.n.m (sobre el nivel del mar) continúan siendo eventos probables en el corto plazo, en cuyo caso cabe la posibilidad de colapsos parciales de éstas, produciendo flujos piroclásticos de moderado alcance en torno al volcán”, añade.
Los aluviones podrían alcanzar los lagos Llanquihue y/o Chapo y el material piroclástico -fragmentos de material volcánico- expulsados a través de las fumarolas podrían concentrarse hacia el norte, noreste y este, en dirección a Argentina, que ya ha sufrido las consecuencias de toneladas de cenizas sobre poblados como Bariloche, Río Negro y Neuquén.
Militares y civiles siguen trabajando en el despeje de cenizas para evitar que las próximas lluvias desborden los ríos, ocasionen el arrastre de puentes y corte de caminos.
En Argentina también se suspendieron los vuelos comerciales para evitar las cenizas que son dañinas para los aparatos. En Chile se han suspendido pocos vuelos pues las líneas áreas tienen la alternativa de volar por rutas costeras.