SANTIAGO DE CHILE. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, dará a conocer el próximo lunes los nombres de sus nuevos ministros, tras haber pedido el pasado miércoles las renuncias de los 23 miembros de su equipo ministerial, informaron hoy fuentes del Ejecutivo.

 

La composición del nuevo gabinete lo dará a conocer la mandataria chilena a las 09:00 hora local (12.00 GMT) de ese día en el palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo, precisaron las fuentes.

 

El acto tendrá lugar poco antes de que Bachelet viaje a Paraguay para una visita oficial.

 

Al anunciar que había pedido la renuncia a sus ministros, la mandataria chilena dijo que se tomaría 72 horas para decidir los cambios en su equipo, plazo que se cumple este sábado, pero finalmente no habrá novedades.

 

Tensión en Chile

 

En medio de la expectación del sector político y de la ciudadanía, Bachelet ha permanecido desde el viernes por la mañana enclaustrada en su domicilio del sector santiaguino de La Reina, analizando en total hermetismo las modificaciones, decididas en el marco de la tensión desatada por casos de corrupción destapados en los últimos meses.

 

Por un lado, parlamentarios y dirigentes de diversos partidos se han visto involucrados en un caso de facturas de honorarios por servicios no prestados entregadas a empresas que financiaban campañas electorales de forma presuntamente ilegal.

 

El caso comenzó como una investigación por fraude tributario que ha involucrado a dueños y ejecutivos de Penta, un banco de inversión que maneja activos por más de 20 mil millones de dólares, y de SQM, una poderosa minera cuyo principal controlador es un exyerno de Augusto Pinochet.

 

Los casos terminaron por salpicar también a miembros del Gobierno, entre ellos el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, cuya salida se da por segura.

 

En familia

 

Otro caso, que golpeó directamente a Bachelet, es el relacionado con la empresa Caval, una de cuyas socias es la esposa de su hijo Sebastián Dávalos.

 

Caval obtuvo a fines del 2013 un préstamo por unos diez millones de dólares, otorgado personalmente por uno de los dueños del Banco de Chile, para comprar unos terrenos en la región de O’Higgins, que vendió poco tiempo después con una ganancia de unos cuatro millones de dólares.

 

Los terrenos en cuestión estaban incluidos en un proceso de cambio de uso de suelos para ser urbanizados y la Justicia investiga presuntos delitos de tráfico de influencias y uso de información privilegiada.

 

Dávalos renunció a su cargo de director sociocultural de la Presidencia y ha sido interrogado como imputado por la Fiscalía, lo mismo que su esposa, Natalia Compagnon.

 

Bachelet, cuya popularidad ha caído a menos del 30 % a raíz del escándalo, nombró una comisión especial que propuso una serie de medidas para mejorar la transparencia de la política.

 

En ese contexto, dirigentes y analistas políticos coincidían en que para concretar los cambios, lo mismo que el proyecto de una nueva Constitución que se comenzará a debatir en septiembre próximo, Bachelet necesitaba renovar su equipo de colaboradores.

 

Hasta ahora, sólo el ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, ha sido ratificado en su cargo.

 

A su llegada a Santiago este sábado, tras asistir en La Haya a los alegatos por la objeción presentada por Chile en el litigio con Bolivia, solicitando la incompetencia de ese tribunal para conocer la demanda boliviana en procura de un acceso soberano al mar, Muñoz consideró “normal” el cambio de gabinete.

 

“Ahora viene una etapa de consolidación y de enmendar las cosas que no hemos hecho bien (…). Esta es una situación normal. Todo gabinete tiene cambios”, dijo a los periodistas.

 

“Todos los gobiernos, mirando hacia atrás, desde el año 1990 hasta ahora han tenido cambios porque hay distintos tiempos políticos”, subrayó el jefe de la diplomacia chilena para quien este gobierno “ha tenido grandes logros” en lo que va de su gestión, iniciada en marzo del año pasado.