América de espíritu gitano. Pachuca veloz y a veces maravilloso. Partido de ida de Cuartos de Final ardiente y vertiginoso en el estadio Hidalgo, con unos Tuzos que bien pudieron golear, y al final, tuvieron que conformarse con victoria por un gol de diferencia: 3-2 que deja abierta la eliminatoria para la vuelta en el Azteca, donde Pachuca requiere, mínimo, un empate para avanzar, mientras que las Águilas están obligadas a ganar 1-0 o 2-1 para avanzar por la ventaja del gol de visitante o 3-2 por la mejor posición en la tabla.
Partido bravo, de ida y vuelta. Con un Pachuca veloz, vertiginoso, lanzado al frente por sus muchachos: Lozano, Salinas, Hernández. Pero sobre todo contundente, tanto, que en apenas 18 minutos ya tenía a los amarillos contra la lona. Primero gracias a un gol de Gabriel Gutiérrez al ángulo, después, uno más de Cristian Penilla, 2-0, y de la ofensiva americanista aún no había nada.
Los pupilos de Matosas tardaron en responder. Lo hicieron hasta el minuto 36, cuando Michael Arroyo acortó distancias (2-1) gracias a un disparo potente que dejó sin oportunidad a Óscar Pérez, pero todavía celebraban en el banquillo americanista cuando Pachuca ya lo había vuelto a hacer, ahora por conducto de Ariel Nahuelpán, quien venció de nuevo a Moisés Muñoz para el 3-1 local.
Si Rubens pide a su directiva renovar por un par de años, después de lo visto en Pachuca poca objeción le podrán poner, porque fue hasta su entrada, en el complemento, que América ofreció reacción. Fue al minuto 50, cuando Ayoví se equivocó y Benedetto venció al Conejo para anotar el segundo tanto americanista. Un 3-2, en un partido de ida y vuelta, ofensivo, pero con serios errores defensivos.
No hubo para más, América, como ya se cansó de hacerlo en Concachampions, intentará una nueva remontada, ante un Pachuca que luce lo suficientemente potente como para echar al campeón defensor.