En nuestro país los programas de salud destinados a la población infantil sin acceso a seguridad social tienden al subejercicio y una falta de planeación a largo plazo, revela el informe “Salud infantil en México. Análisis exploratorio de la política pública presupuestal 2000-2015” de Save the children.
El estudio analiza seis programas de salud: unidades Médicas Móviles, Seguro Médico Siglo XXI, Prospera, IMSS Prospera, Programa de Apoyo Alimentario y Salud Materna y Parental.
Una de las observaciones que hace el documento es que en cada relevo de gobierno federal hay cambio en las en los objetivos y prioridades, una falta de criterios claros para aumentar o reducir recursos y ajustes en el nombre de los programas.
Entre sus conclusiones destaca que pese a que los programas analizados son de los más relevantes para la salud infantil de las niñas y los niños más marginados, éstos no logran rebasar en su conjunto 3% del gasto programable, por lo que el Estado debe de incrementar los recursos para que en verdad convierta la salud en una prioridad.
“Todos los programas, con la excepción de Prospera, muestran niveles importantes de subejecución. (Por lo que se recomienda que) los recursos destinados a estos programas se deben ejecutar en su totalidad y de no ser así se debe proporcionar información transparente que justifique los subejercicios”, dice el documento.
Botones de muestra
El programa de Unidades Médicas Móviles, desde 2007, ha reportado subejercicios. Este programa depende presupuestalmente de la Secretaría de Salud por medio del Ramo 12, el cual osciló entre los 660 millones y 871 millones entre 2008 y 2015.
IMSS Oportunidades comenzó el siglo con 7 mil 274 millones de pesos, pero en 2004 bajó a 6 mil 163 millones; en 2009 subió a 9 mil 292 millones, para el año siguiente retroceder a 8 mil 300 y de ahí subió a 9 mil 719 en 2015. En este programa la forma de gastar es dispareja, ya que en el periodo 2003-2004 se devengaron mil 300 millones más de lo presupuestado, pero entre 2005 y 2009 el subejercicio alcanzó los 2 mil 300 millones.
La evolución presupuestaria del programa de Apoyo Alimentario tuvo un patrón más perceptible. De 2004 a 2008 se redujo 46%, eso antes de dispararse al año siguiente cuando llegó a los 2 mil 253 millones y al año siguiente a los 6 mil 058 millones. La instancia responsable del presupuesto es Sedesol por medio del ramo 22. Sin embargo, eso no significó un mejor gasto. Antes de que su presupuesto se disparara, Apoyo Alimentario casi no tenía subejercicio, pero en 2009 el subejercicio fue de 33% y en 2010 (cuando tuvo su presupuesto más alto) fue de 30%.
El caso del Seguro Médico Siglo XXI (enfocado sólo a los niños y niñas menores de 5 años) muestra dos tendencias: una baja en la asignación de recursos y subejercicios en casi todos los años desde su creación, 2008. Comenzó con recursos por 3 mil 387 millones hasta bajar gradualmente a los 2 mil 605 millones. Pero desde su primer ejercicio reportó gastos inferiores a su presupuesto de manera constante, salvo en 2012. La Secretaría de Salud por el Ramo 12 es la responsable del presupuesto.
El que se salva
La única excepción que encontró el estudio fue el programa Prospera, que desde 2001 casi no tiene subejercicios, aunque aclara que el programa no sólo es de salud, también incluye educación y alimentación.
Prospera tiene tres dependencias responsables Sedesol con el Ramo 20, ña Secretaría de Educación Pública por el Ramo 11 y la Secretaría de Salud con el Ramo 12. Su presupuesto creció de manera constante desde 2001, cuando tuvo 24 mil millones, hasta 2015, cuando le asignaron 75 mil millones.
En ese lapso de tiempo, sólo durante 2010 y 2011 prospera presentó subejercicios. Entre ambos años dejó de ejercer 14 mil millones de pesos.
El último programa es el de Salud Materna y Perinatal no aparece en los documentos presupuestario por lo que es difícil dar seguimiento a sus asignaciones y la ejecución de los recursos de manera global.
Comments are closed.