Triste Liguilla. ¿Cuál fiesta grande? Si, en la semana, la Bombonera de Boca Juniors dio un espectáculo bochornoso por la violencia exhibida en el clásico argentino de la Copa Libertadores, el Estadio Jalisco algunos “aficionados” buscaron no quedarse atrás.

 

En una brillante actuación de Chivas, que goleó sin contemplaciones 4-1 al Atlas para avanzar a Semifinales, hubo invasión a la cancha de varios seguidores rojinegros que agredieron a sus jugadores y con ello suspensión del partido por casi 20 minutos. Una acción que alerta a las autoridades sobre las medidas de seguridad en los estadios del futbol mexicano.

 

En lo deportivo, irreprochable cada minuto que Chivas tocó la pelota. Una verdadera cátedra de cómo jugar Liguilla, de parte de José Manuel de la Torre para su colega Tomas Boy. Pero sobre todo, el mejor partido en mucho tiempo de Marco Fabián, quien volvió a ser ese medio creativo con el que soñaría cualquier equipo europeo. No por nada cerró su participación con tres anotaciones.

 

Chivas se puso serio. ¿Quién se acuerda del descenso? Ahora Guadalajara es favorito al título y a recuperar, aunque sea en compartido con América, el nombramiento del equipo más ganador de México, si logra completar el torneo con su estrella número 12.

 

Guadalajara fue amo y señor desde el inicio. Sorprendió con el 0-1 al minuto cinco de Fabián. Atlas empató al siete gracias a Medina. Después, no hubo más para el local. Chivas anotó el 1-2 al 16 gracias a Fabián, quien repitió a los 39 (1-3) y cerró el 1-4 Omar Bravo al 53.

 

El resto, hechos que manchan el futbol mexicano: Gerardo Venegas respondió la agresión del aficionado que ingresó a la cancha y la seguridad del estadio resultó insuficiente para contener a los seguidores del Atlas. El aviso está en el futbol argentino, en el clásico Boca vs River, que se suspendió por la agresión a jugadores.