WASHINGTON. El presidente Barack Obama aseguró el viernes que tiene un interés personal en asegurarse de que un acuerdo nuclear con Irán cumpla lo prometido. Agregó que no aceptará un pacto que resulte mal: “Este acuerdo va a tener mi nombre en él“, dijo.

 

Obama habló en una de las sinagogas más importantes de Washington ante la Congregación Adas Israel en conmemoración del Mes de la Herencia Judía Estadunidense. Su presentación coincide con una campaña del movimiento Solidarity Shabbat, dedicado a mostrar unidad de los líderes políticos de Europa y América del Norte contra el antisemitismo.

 

El presidente norteamericano buscó tranquilizar a la comunidad judía al decirle que él comparte el interés de Israel de que Irán no desarrolle armas atómicas.

 

Precisó que eso no quiere decir que deba haber desacuerdos periódicos entre los gobiernos de Estados Unidos e Israel.

 

Obama dijo que se opone “enérgicamente” a los señalamientos de que las diferencias políticas entre su gobierno y el israelí muestran una falta de apoyo de Estados Unidos a su aliado la de toda la vida.

 

El presidente dijo que nadie debe esperar que ambos gobiernos resuelvan sus diferencias sobre la construcción de asentamientos judíos o el congelado proceso de paz con los palestinos. “Eso no es una verdadera medida de la amistad”, dijo Obama en declaraciones a unas 1,200 personas.

 

El presidente habló en medio de tensiones diplomáticas con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, en particular sobre los intentos de Obama para llegar a un acuerdo nuclear con Irán. Netanyahu considera que el programa nuclear de Irán es una amenaza existencial para Israel.  DM