La Secretaría de Hacienda redujo su previsión de crecimiento para este año un punto porcentual, al ubicar su intervalo entre 2.2 y 3.2%, su cuarta reducción trimestral al hilo, luego que el INEGI informara que la economía mexicana reportó una débil expansión los primeros tres meses del año de 0.4% con respecto al trimestre previo.
El subsecretario de Hacienda, Fernando Aportela, explicó que el crecimiento económico del país se vio limitado principalmente por el débil desempeño de Estados Unidos que creció 0.2% en el mismo lapso, un nivel por debajo del pronóstico de 2.8%.
En segundo término, el PIB de México se vio afectado por la caída de la plataforma petrolera, que cayó tanto a nivel producción, como en el valor de las exportaciones de crudo.
“El dato confirmó que la economía se debilitó en el primer trimestre, principalmente por el sector industrial, pero el sector servicios tuvo un buen desempeño”, dijo a 24 HORAS, Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays México.
Por otro lado, Aportela defendió el crecimiento del PIB en el primer trimestre del año de 2.5% anual y 0.4% trimestral que reportó hoy el INEGI, al describirlo como un dato “balanceado” y “favorable” con respecto al clima de volatilidad en los mercados a nivel mundial, y la caída en los precios del petróleo que han afectado las finanzas públicas del gobierno federal. .
“El aumento del PIB se mantuvo en un entorno internacional complejo y volátil. México se ubicó por arriba del pronóstico para América Latina que se ubicó en apenas 0.9% en el cuarto mes del año”, apuntó Aportela.
“Este fue un resultado sin sorpresas, ya que se esperaba el impacto de la caída en los precios del petróleo, además de los recortes presupuestales. Este nivel de crecimiento es un indicador de lo que posiblemente observemos el resto del año, ya que el mismo Banco de México también empezó a revisar a la baja”, dijo Oliver Ambía, director académico del Departamento de Finanzas del ITESM Santa Fe.
Sin embargo, la previsión de Hacienda para 2015 del PIB de México se ubicó por debajo del pronóstico para el crecimiento económico mundial que fue de 3.5% en abril pasado, y fue inferior al de las economías emergentes, y bajó a 4.3% ese mismo mes.
Por su parte, Luis Robles, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM) dijo que el dato de crecimiento económico del INEGI se debió a elementos coyunturales y no estructurales. “Estamos optimistas en que el PIB en los próximos trimestres y años tendrá una tendencia de crecimiento”, dijo.
Además, el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) reportó un descenso mensual en marzo pasado de 0.6%, “lo que prende los focos amarillos para ver si es temporal o que la economía mejore”, dijo Oviedo, economista en jefe de Barclays México.
Dentro de los componentes del PIB, las actividades primarias, como la agricultura, crecieron 3% en el primer trimestre con respecto al previo, mientras que las secundarias que incluye al sector industrial cayeron 0.2%, y las terciarias –servicios como el comercio y el transporte– crecieron 0.5%.