GUATEMALA/GINEBRA. El ministro de Gobernación de Guatemala Mauricio López Bonilla renunció al cargo en medio de una crisis institucional por escándalos de corrupción vinculados a funcionarios cercanos al presidente Otto Pérez Molina.

 

El vocero presidencial Jorge Ortega informó la renuncia del funcionario y dijo que será oficializada en breve por el presidente Pérez Molina.

 

López Bonilla, un teniente coronel del ejército, era conocido como el hombre fuerte del presidente.

 

Llegó junto a Pérez Molina a la cartera del Interior el primer día de gobierno el 14 de enero de 2012. Fue su jefe de campaña y es actualmente el secretario general adjunto del oficialista Partido Patriota.

 

Según activistas durante su gestión se agudizaron las violaciones a los derechos humanos, especialmente en el interior, relacionadas con la protección de transnacionales de industrias extractivas que operan en el país.

 

A la ONU le preocupa las torturas

 

El Subcomité para la Prevención de la Tortura de la ONU instó al Gobierno de Pérez Molina a mejorar la supervisión independiente de las condiciones de detención en el país para evitar casos de tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes.

 

En un comunicado fechado en Ginebra, el subcomité informó de que ha transmitido directamente esta solicitud a las autoridades guatemaltecas tras una visita al país centroamericano.

 

“Esperamos que el Gobierno de Guatemala utilice nuestro informe para mejorar las condiciones de las personas privadas de libertad y para asegurar el respeto de todas sus garantías legales y de procedimiento”, afirmó, citado en el comunicado, Felipe Villavicencio, jefe de la delegación.

 

Los miembros de la delegación llevaron a cabo entrevistas privadas y confidenciales con agentes del orden público, personal médico y personas privadas de libertad.