Rigoberta Menchú, premio Nobel de la Paz, será observadora electoral en Guerrero y junto a otras dos organizaciones civiles de México, realizará un diagnóstico de las elecciones en estados con incidencia del crimen organizado y movimientos sociales.
En el Instituto Nacional Electoral (INE), al recibir su constancia como observadora electoral internacional, Menchú afirmó que acudirá a Guerrero para enviar un mensaje de paz y hacer un “juicio posterior” sobre el impacto del crimen organizado en los comicios del próximo 7 de junio.
Indicó que eligieron observar la elección de Guerrero “no porque esté en caos”, sino para abonar a la participación ciudadana en las urnas.
Menchú se solidariza con padres de Ayotzinapa
“Todos hemos estado al lado de Guerrero, desde ese sentir de lo que ha pasado con los hermanos de Ayotzinapa, no es una broma que hemos acompañado esa tragedia que deja una huella imborrable y en el tiempo cívico es muy importante acompañar simbólicamente”.
Uno de sus propósitos es “sobre todo animar a todos los ciudadanos” tanto a los que fungirán como funcionarios electorales como a los que acudirían a las urnas.
Sobre el contexto político y social de la entidad, manifestó que “ójala que se recupere el estado en cuanto a la credibilidad de sus autoridades que se tiene que reconstruir”.
Por su parte, Marco Antonio Hernández, de la Fundación Murrieta, apuntó que el objetivo es en dos vertientes: medir la incidencia del crimen organizado en las elecciones y el impacto del movimiento social, derivado de la desaparición de los 43 normalistas, que pide la cancelación de los comicios“. DM
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