MIAMI. Victoria Siegel, de 18 años, hija del matrimonio David y Jackie Siegel, propietarios de la mayor mansión familiar en Estados Unidos, fue hallada muerta en la vivienda de Orlando, en el centro de Florida, informaron hoy medios locales.

 

El forense examina las causas de la muerte de la chica, hija de esta pareja que alcanzó popularidad por el documental The Queen of Versailles, sobre esta monumental imitación palaciega y la vida de derroche y lujo del matrimonio.

 

Según el diario Sun Sentinel, después de hallar el sábado inconsciente a la joven se le practicó la reanimación cardiopulmonar, pero no se pudo hacer nada por salvar su vida y falleció en el Health Central Hospital, en Ocoee.

 

En su cuenta de Facebook, la madre de la chica expresó el profundo dolor y tristeza que embarga en estos momentos a la familia y pidió respeto para la privacidad familiar.

 

Los padres multimillonarios de Siegel se habían embarcado en la construcción de una gran mansión familiar con 13 dormitorios, un cine, bolera, pista de patinaje, costosas puertas de madera y antigüedades.

 

La denominada mansión Versailles, situada en la urbanización The Reserve at Lake Butler Sound, en Windermere, cerca de Orlando, es una construcción de dudoso gusto francés e interior manierista.

 

La casa llamó tanto la atención que fue motivo de un programa de televisión en el que se seguían las andanzas del matrimonio y cómo este afrontaba diversas situaciones generadas por las obras y los contratiempos económicos.

 

Jackie Siegel apareció la semana pasada en un programa de telerealidad de la cadena ABC en el que admitió que había delegado la crianza de sus hijos en las niñeras contratadas.

 

“Soy algo así como bebefóbica. Rara vez cambié los pañales a los niños. Siempre teníamos seis niñeras alrededor“, dijo al Sun Sentinel.

 

El empresario y millonario David Siegel amasó su fortuna con su compañía de viviendas de tiempo compartido Westgate Resorts.

 

La monumental mansión cuenta además con spa, tres piscinas, una de ellas de dimensiones olímpicas y otra de agua salada, once cocinas, treinta cuartos de baño y garaje para una veintena de vehículos, todo un récord para una residencia privada que podría alcanzar un precio de unos cien millones de dólares.  DM