BARCELONA. Barcelona se ha echado a la calle otra vez para brindar con sus héroes deportivos el triplete que redondeó el FC Barcelona con la consecución de la Liga de Campeones, la quinta en su historia, que ya provocó que unos 50 mil aficionados salieran a las calles la noche del título y ayer, ya con el equipo azulgrana en la ciudad, se sumaron miles más para saludar a los jugadores en el recorrido de un desfile que ha obligado a las dos hileras de policía que custodian el autobús del equipo, a ensanchar la vía.

 

Leo Messi ha sido el jugador más aclamado por los aficionados, que han invadido las aceras del largo recorrido por las calles céntricas de la ciudad, hasta provocar que, como ya es habitual, la programación se haya alterado.

 

Además de Messi, otro de los protagonistas ha sido nuevamente Gerard Piqué, el más animado de los jugadores que en el primer descapotable y en la parte superior hacía bailar a los suyos y los aficionados.

 

Las abarrotadas calles de Barcelona vieron la gran comitiva comandada por el autobús de los jugadores, que llevaba en la parte alta y frontal las tres copas que ha ganado el conjunto catalán esta temporada: la Liga, la Copa del Rey y la Liga de Campeones.

 

Después del desfile, la fiesta se trasladó al Camp Nou, donde cerca de 70 mil aficionados recibieron a los campeones.