WASHINGTON. Un juez estatal en Charleston impuso hoy una fianza de un millón de dólares al sospechoso de la masacre en la Iglesia Metodista Episcopal Africana Emanuel (AME), en una audiencia en la que familiares de las víctimas lo perdonaron.
Dylan Storm Roof compareció, mediante videoconferencia, ante el magistrado estatal James Gosnell, en una audiencia que duró poco más de 13 minutos en la corte del Condado de Charleston.
Esposado, vistiendo un traje de prisionero a rayas, mirando ocasionalmente hacia la cámara y sin mostrar emoción alguna, Roof permaneció de pie en un pequeño cuarto sin ventanas, resguardo por dos oficiales policíacos en trajes antimotín.
El joven, de 21 años, habló de manera breve en cuatro ocasiones con una voz baja y monótona sólo para responder al juez Gosnell cuando éste le pidió que confirmara su dirección, su edad y si se encontraba empleado.
Gosnell explicó que esta audiencia tuvo como propósito revisar la evidencia que el estado está usando para establecer causa probable y sustentar los cargos en su contra, fijando fianza de un millón de dólares por el cargo de posesión de arma de fuego durante la comisión de un crimen.
De igual manera explicó que no tenía autoridad para imponerle fianza por los nueve cargos de asesinato que fueron presentados poco antes en su contra, tras lo cual permitió a familiares de alguna de las víctimas dirigirse al acusado.
“Te perdono. Nunca podré hablar con ella otra vez. Te perdono y tengo piedad para tu alma. Me lastimaste, lastimaste a mucha gente, pero te perdono”, dijo entre llanto la hija de Ethel Lance, de 70 años de edad y quien se desempeñaba como sacristán de la iglesia.
Anthony Thompson, hijo de Myra Thompson, dijo que al igual que el resto de las familias, la suya lo perdonaba “pero quisiéramos que tomaras esta oportunidad para arrepentirte. Dale tu vida al único que importa: Cristo”.
Felicia Sanders, madre de Tywanza Sanders, de 26 años, la víctima más joven, dijo a Roof que “cada fibra de mi cuerpo duele y nada será igual”, calificando a las víctimas como alguna de la gente más hermosa que conocía.
“Tywanza era mi hijo, Tywanza pero también era mi héroe, pero como decimos en los estudios bíblicos, que Dios tenga piedad de tu alma”, dijo la mujer con la voz quebrada por momentos y en medio de sollozos de algunos de los presentes.
Alana Simmons, nieta de Daniel Simmons, un pastor retirado de 74 años y la víctima de más edad del grupo habló con voz suave pero firme en términos similares.
“Aunque mi abuelo y las otras víctimas murieron a manos del odio, el pedido de cada uno aquí por tu alma es prueba de que ellos viven en amor. El odio no ganará”, dijo.
Sin poder contener la emoción, una hermana de la reverenda DePayne Middleton Doctor confesó estar muy enojada, “pero no tengo lugar para el odio, y te perdono. Rezo a Dios por tu alma, y le doy gracias a Dios de que estaré aquí cuando llegue la hora de tu juzgamiento”.
Gosnell estableció el 23 de octubre próximo como fecha para la próxima audiencia de comparecencia, que será precedida por una segunda a celebrarse el 5 de febrero del 2016.