El senador panista Javier Lozano Alarcón propuso que se convoque a un periodo extraordinario de sesiones para discutir y, en su caso, aprobar los dictámenes de la llamada “ley Ficrea”, así como la desvinculación del salario mínimo, que quedaron pendientes en el pasado periodo ordinario de sesiones.
En un punto de acuerdo que se envió a la Primera Comisión de la Comisión Permanente, planteó que las diferencias entre las fracciones impidió la aprobación de la desindexación del salario.
Indicó que actualmente el salario mínimo está vinculado al crecimiento de la productividad nacional y su utilización como unidad de cálculo para cumplir obligaciones que establece la ley o bien como unidad de referencia en la economía.
Esa situación, dijo Lozano Alarcón, ha propiciado que en los procesos de negociación para fijar los salarios mínimos “existan presiones” para impedir que se mejore el ingreso ante el impacto que el aumento tendría en las obligaciones, créditos, derechos y contribuciones.
Recordó que el dictamen propone modificar el término “salario mínimo” sólo para efectos de su función como “unidad de cuenta” y para proceder a su desindexación, es decir desvincularlo de los precios de trámites, multas, impuestos y prestaciones, con el propósito de establecer una política de recuperación del poder adquisitivo.
Sobre el proyecto para expedir la nueva Ley de Ahorro y Crédito Popular y reformar diversas disposiciones de la Ley para Regular las Actividades de las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo, del Código Federal de Procedimientos Penales y de la Ley de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, refiríó que éste quedó de primera lectura en el último día del periodo ordinario.
Hizo notar que la llamada “Ley Ficrea” busca fomentar el ahorro formal, principalmente en los pequeños ahorradores, al fortalecer el régimen de vigilancia y las facultades de las autoridades respecto a la gestión de los negocios y los depósitos de la personas.
A decir del legislador, de aprobarse, esa propuesta beneficiará a 80 por ciento de los afectados por la Sociedad Financiera Popular Ficrea, se contará con un sector eficiente y sólido y se fortalecerán los mecanismos de supervisión, especialmente de las sociedades de ahorro y crédito popular.
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