La construcción del deprimido de Río Mixcoac al cruce con Insurgentes Sur, para la cual el Gobierno capitalino invertirá mil 400 millones de pesos, sólo va a beneficiar a los automovilistas, mientras que los peatones quedarán disminuidos con esta obra, criticó el especialista en movilidad Roberto Remes.

 

El experto va más allá y advierte que con el diseño de la glorieta que se montará en la intersección de dichas avenidas, los peatones caminarán de 20 a 30 metros más de lo que lo hacen hoy y al ser un crucero inseguro prevé hasta una persona al mes muerta por atropellamiento.

 

“La Glorieta es absolutamente vial, en el centro no hay nada de disfrute, tampoco habría cómo llegar, es un territorio inaccesible. Lo que hoy se cruza en línea recta en los 50 metros de ancho de Río Mixcoac, con el rodeo de la glorieta va a implicar que el cruce sea de 80 metros”, dijo en entrevista con 24 HORAS.

 

Para Roberto Remes el proyecto del deprimido de Río Mixcoac está planteado del auto hacia al peatón, cuando debe ser viceversa en concordancia con la nueva Ley de Movilidad, publicada en julio de 2014 y en la que se coloca al peatón como primera prioridad.

 

Por ello lamentó que además se realizará un corte de banquetas para poder mantener tres carriles en Insurgentes, lo cual dejaría a las personas caminar por aceras no de 2.4 metro y no de 3.8, como están actualmente, en detrimento de la movilidad peatonal,

 

De hecho la Ley de Movilidad también coloca al transporte público como prioridad antes que el automóvil, por lo cual Remes asegura que el deprimido de Río Mixcoac no está pensado de manera integral, ya que quedará muy profundo y esto afectará la eventual construcción de la Línea 10 del Metro.

 

“Eso también tiene que estar en la discusión porque si ya vamos a excavar por qué no hacemos el túnel y el día de mañana cuando se haga la Línea 10 ya está previsto el cajón”, recomendó el experto.

 

24 HORAS publicó el 29 de enero pasado que la construcción del deprimido vehicular impactará en el plan de la Línea 10 del Metro, contemplada en el Plan Maestro del Sistema de Transporte Colectivo (STC) en su última versión de 1996 para correr por debajo de Insurgentes.

 

El trazo sería desde Eulalia Guzmán, en Tlatelolco, hasta Cuicuilco, en Tlalpan, corriendo por debajo de Insurgentes sin desviarse de esa avenida, salvo para librar la Glorieta de Insurgentes. De hecho la estación Plateros estaría ubicada justo donde se construirá el deprimido de Río Mixcoac.

 

Repensar proyecto

 

El también director de Ciudad Humana México criticó que el peatón pierde espacios públicos, y como ejemplo puso el camellón que hoy se encuentra sobre Río Mixcoac y que será sustituido por un parque lineal, lo que ha sido la principal molestia de los vecinos de la zona.

 

Roberto Remes afirma que no hay un proyecto ejecutivo para el parque lineal y que éste tampoco está contemplado en los dos planos de la Secretaría de Obras y Servicios que conforman la planta del deprimido de Río Mixcoac.

 

Por ello propuso seguir analizando la viabilidad de retomar el proyecto de 2008 que contemplaba dos túneles paralelos que no afectaban el camellón para preservar los espacios públicos.

 

Señaló que otra acción que compensaría al peatón es revocar el permiso de operación al estacionamiento que se encuentra en Plateros, justo en la esquina suroeste del cruce de Río Mixcoac e Insurgentes para convertirlo en área verde.