A más de tres meses de que se implementara un nuevo esquema de distribución de combustibles por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex), con el fin de evitar la ordeña de gasolinas y diésel, este ilícito ha tenido un incremento de 32% en comparación con el primer trimestre del año, de acuerdo con datos de la paraestatal.

 

Entre enero y marzo pasados, Pemex registró un total de mil 211 perforaciones ilegales, 57% más que las contabilizadas en el mismo periodo del año pasado. Asimismo, el pasado 6 de julio la compañía informó que en lo que va del año tenía detectadas dos mil 813 puntos de ordeña de combustible a nivel nacional; es decir, un incremento de 32% entre abril y lo que va de julio en comparación con el primer trimestre.

 

En febrero pasado, Pemex anunció una nueva estrategia de distribución de combustibles con el fin de combatir su robo en el país. De acuerdo con este esquema, desde el mes de abril las 77 terminales de almacenamiento en el país tienen la capacidad de llevar a cabo el procesamiento final del combustible, el cual se da por medio de agregar los aditivos químicos necesarios a los combustibles y, posteriormente, distribuirlos mediante pipas a la red de gasolineras en el país.

 

En la forma tradicional, el combustible era procesado completamente en las refinerías y transportado a los puntos de distribución a través de la red de ductos de Pemex, lo que facilitaba el robo directo de las tomas.

 

De esta manera se pretendía desmotivar al crimen organizado, ya que el combustible no terminado que atraviesa los ductos no es apto para venderse debido a la falta de aditivos, por lo que de usarse arruinaría la marcha de los vehículos. Esto se planeó para reducir el robo de las gasolinas, aunque no ha resultado de esta manera.

 

Una fuente de la industria petrolera dijo a 24 HORAS que al momento no se ha sabido de alguna terminal de distribución que tenga los componentes o equipos industriales para realizar, con el debido control de calidad, el procesamiento final del combustible.

 

“Fue una decisión llena de suspicacias de orden técnico, porque instrumentarla tiene costos bastante altos y una empresa como Pemex, agobiada por la baja en la producción y la disminución en los ingresos de su principal producto, no puede asumirlos de manera clara. Se trató más de un buen deseo, y toda la parte instrumental no se está viendo con la misma celeridad con la que se expresó”, comentó la fuente consultada.

 

Sin freno

 

Por otra parte, el robo de combustible no ha bajado: en el primer semestre del año Pemex registró 2 mil 593 tomas clandestinas en todo el país, esto es, 55.6% más que las mil 666 encontradas en el mismo periodo de 2014.

 

Datos de la paraestatal señalan que las entidades con mayor número de tomas clandestinas son Tamaulipas, donde los puntos de ordeña crecieron 6.8%; Guanajuato, donde el incremento fue de 139%; Puebla (189%), Jalisco (106%), Tabasco (183%), Estado de México (97%), Veracruz (23%) y Sinaloa, en esta última se redijeron 1.5%.

 

 

Ordeña