TORONTO. Crisanto Grajales apenas pudo trotar diez minutos en la víspera de su compromiso en el triatlón de los Juegos Panamericanos debido a una lesión en la espalda.
Pero el triatleta mexicano se presentó el domingo a la prueba. ¿El resultado? Se colgó la medalla de oro tras protagonizar un cierre electrizante con el estadounidense Kevin McDowell, un triunfo que prácticamente lo depositó en sus segundos Juegos Olímpicos y redondeó una muy buena cosecha de su país en el deporte.
“Fue una cuestión de aguantar durante todo el trámite de la prueba y meterle corazón”, manifestó Grajales a The Associated Press. “Por eso esta medalla tiene un doble sabor para mí”.
Grajales, de 28 años y 13ro en las pasadas justas de Guadalajara, cruzó la meta con tiempo de 1 hora, 48 minutos y 58 segundos, superando por un segundo a McDowell, quien se conformó con la plata. México también se quedó con el bronce, obtenido por Irving Pérez.
El oriundo de Xalapa sufrió la lesión en la parte baja de la espalda y la pelvis hace apenas dos semanas. En la víspera, solo había podido hacer un trote de minutos y hasta llegó con molestias a la competencia que se realizó en una mañana soleada en el lago de Ontario.
Luego de mantenerse entre los primeros en las tres pruebas del triatlón, Grajales aceleró en el último kilómetro de la carrera, en que se fue a duelo con McDowell. Pérez y el argentino Gonzalo Tellechea quedaron un poco más atrás.
“A un kilómetro (del final) me animé a un jalón”, dijo Grajales, de padres maratonistas.
El triunfo de Grajales fue también un trabajo en equipo, en el que el otro competidor mexicano, Rodrigo Gonzalez, fue el que atacó inicialmente pero terminó sacrificado y en el 11mo puesto.
“La estrategia era estar adelante desde el principio, Rodrigo propuso un poco y nos convino”, explicó Pérez, que disputaba sus primeras justas.
Además, la victoria confirmó el buen presente de Grajales, décimo en el ranking mundial, y refleja los frutos de una preparación de primera, que incluye entrenamientos en Europa con el multicampeón mundial y medallista de plata olímpico, el español Javier Gómez Noya.
“La habíamos trabajado por mucho tiempo y me sabe a gloria”, manifestó el triatleta.
El oro también lo deja prácticamente metido en la cita olímpica de Río de Janeiro del próximo año. “Ahora vienen los Juegos Olímpicos y hay que llegar en una muy buena forma”, anticipó.
Grajales destronó a Reinaldo Colucci, el campeón de Guadalajara que quedó relegado al 21er puesto. El brasileño venía de recuperarse de una lesión en un pie.
La prueba contó con 135 kilómetros de nado, 40.2 kilómetros en bicicleta y la carrera final de 10 kilómetros.
El sábado, la chilena Bárbara Riveros se llevó el oro en la rama femenina, en una prueba en que la mexicana Paola Díaz se alzó con la plata. México termina así con la mayor cosecha del triatlón.
OBO