RÍO DE JAINEIRO. En un escenario de recesión e incertidumbre económica, la producción y venta de autos en Brasil cayó a niveles de hace casi una década, lo que provocó despidos en el sector, mientras México se afianza como líder productor de América Latina.
En junio la industria automotriz brasileña volvió a sufrir los efectos de la desaceleración que azota a la economía del país, que este año podría contraerse hasta un 1.5 por ciento, y la fabricación de automóviles cayó un 12.5 por ciento con respecto a mayo.
En total, el número de autos montados suma ya una caída del 14.8 por ciento y, si en el primer semestre del año pasado superó el millón y medio de unidades, en los primeros seis meses de 2015 apenas alcanzó el millón 276 mil unidades, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil (ANFAVEA).
Datos reportados por la prensa indican que la mitad de las 29 fábricas de vehículos que tiene actualmente Brasil están impactadas por planes de restricción de producción, ante el retroceso de las ventas nacionales, que cayeron 19.4 por ciento en lo que va de año.
Al menos 14 mil 500 empleos fueron recortados en los últimos 12 meses, pero expertos indican que se podrían producir más despidos en la industria, muy afectada por la desaceleración económica de Brasil, cuyo Producto Interno Bruto (PIB) debería caer este año 1.5 por ciento.
La previsiones señalan que el gigante sudamericano producirá apenas 2.5 millones de vehículos este año, un 18 por ciento menos que en 2014, una tendencia que contrasta con el auge histórico en México.
El país norteamericano “continúa registrando cifras récord”, según la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), y en el primer semestre las montadoras mexicanas superaron el millón 720 mil unidades ensambladas, 8.1 por ciento más que en el mismo período de 2014.
Las ventas nacionales, con un incremento del 21.9 por ciento en el primer semestre, pero sobre todo las exportaciones a Estados Unidos, Canadá y Alemania, principales destinos de los autos y las autopartes mexicanas, impulsan este crecimiento.
De esta forma, México ha afianzado su posición como mayor productor latinoamericano de autos, mientras Brasil cayó a la segunda posición en el continente y, en la clasificación mundial de mayores mercados consumidores de autos, pasó del cuarto al séptimo lugar, según la consultora Jato Dynamics.