La primera pregunta que a “boca jarro” le hicieron al secretario de  Gobernación en la conferencia de prensa que ofreció el lunes para informar sobre las acciones y avances a 48 horas de la fuga del “Chapo” Guzmán fue: ¿Está  su renuncia en la mesa?

 

osorio_chong_comparecencia_WEB

 

La respuesta de Osorio Chong fue contundente: “Los momentos de crisis no son para renunciar, son para enfrentarlos”. En un evento tan delicado hay que investigar, sancionar y por supuesto recapturar al peligroso delincuente. No se vale renunciar pues.  Hay mucho qué hacer, agregó posteriormente el secretario de Gobernación  ante la insistencia de  quienes piden su renuncia.

 

Y tiene razón Miguel Ángel. Primero lo primero: Investigar quiénes fueron los funcionarios públicos (federales, estatales, municipales) que colaboraron con el delincuente, los que le prepararon el terreno, los que “se hicieron de la vista gorda” para que éste pudiera huir, y castigarlos con todo el peso de la ley.

 

Después, corregir las fallas en el sistema penitenciario Federal – 22 reclusorios incluyendo las Islas Marías– y contribuir a que en los penales estatales y municipales se mejoren los controles de seguridad; combatir la corrupción que los tiene penetrados; la impunidad y otros males que contribuyen al deterioro de los mismos, como la sobrepoblación, el tráfico de drogas, la falta de controles, de capacitación por no referirnos  al catálogo de deficiencias.

 

Otra tarea importantísima que tiene que hacer el secretario de Gobernación, es eficientar los servicios de inteligencia y contra inteligencia del Gobierno mexicano, los cuales quedaron en evidencia en la fuga de El Chapo Guzmán, porque digan lo que digan y pretendan justificar lo injustificable, la realidad es que en el caso que nos ocupa y otros más, el CISEN, la MIA (Mexican Intelligence Agency), la policía cibernética y otros organismos que se dedican al espionaje y contraespionaje hicieron el ridículo.

 

Es inconcebible que Guzmán Loera se haya fugado a partir de una estrategia que evadió todos los sistemas internos de seguridad diseñados conforme a estándares internacionales. Más aún, que el hoy prófugo de la justicia, haya contado con la complicidad de personal y/o funcionarios del Centro de Readaptación Social del Altiplano, como prácticamente reconoció el secretario de Gobernación. De confirmarse estos hechos, como seguramente se confirmarán, constituiría un acto de corrupción, deslealtad y traición a los mexicanos, a la institución y a los integrantes de las fuerzas federales que con entrega y compromiso  por México, arriesgaron su vida para capturarlo. y esas actitudes no pueden quedar impunes, reiteró Osorio Chong. ¡Claro que el contubernio no puede quedar impune!

 

Por eso y muchas otras cosas más, el secretario de Gobernación no puede,  no debe y no tiene que renunciar. Primero lo primero: recapturar a El Chapo; castigar a los funcionarios que colaboraron el su fuga aplicando toda la fuerza de la ley; fortalecer la seguridad en todos los centros federales de readaptación social, particularmente en aquellos donde se encuentra recluidos los “capos di tutti capis”.

 

Y convencer a los legisladores de  que urgen reformas al sistema penitenciario federal; dialogar con la Comisión Nacional de Derechos Humanos para que haga a un lado sus acciones caritativas, sobre todo en los delincuentes de alta peligrosidad. Por cierto, ayer, el Secretario de Gobernación, se reunió  con el Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Luis Raúl González Pérez, a quien le dejó en claro que el respeto a los derechos humanos de ninguna manera fue la causa de la evasión de Joaquín Guzmán Loera

 

Finalmente un consejo, uno nada más, a los comunicadores bisoños del secretario de Gobernación: No lo manden al “matadero”, mucho menos en un tema tan escabroso.

 

AGENDA PREVIA

 

La Comisión Federal de Electricidad emitió ayer  el fallo de la licitación para la prestación del servicio de transporte de gas natural, a través del gasoducto denominado San Isidro – Samalayuca. El  ganador fue Gasoducto de Aguaprieta, subsidiaria de la empresa IEnova, que presentó la mejor oferta técnica y económica para la CFE (147 millones 456 mil 900 dólares). Este fallo le permitirá a la CFE ahorrar 53 millones de dólares, es decir 26%, respecto al presupuesto estimado para este proyecto.