Uno de los vehículos sin conductor de la multinacional estadounidense Google se vio implicado por primera vez en un accidente de tráfico en el que hubo personas que sufrieron heridas leves, informó hoy la propia compañía.
En una entrada en su blog, el director del programa de Google de coches sin conductor, Chris Urmson, indicó que la culpa del accidente la tuvo el otro vehículo, algo que Google asegura que ha ocurrido en todos los accidentes en que sus coches se han visto implicados.
Según Urmson, un Lexus RX450h equipado con sensores de Google que circulaba por Mountain View (California) se paró en una intersección pese a tener el semáforo en verde porque al otro lado de la calle los coches se encontraban parados, evitando así quedar detenido en medio de la intersección.
Entonces, un coche que venía por detrás no frenó y colisionó contra el Lexus de Google a una velocidad de 27 kilómetros por hora, lo que ocasionó desperfectos en ambos vehículos y heridas leves en el cuello de las tres personas que viajaban en el coche de Google y del conductor del otro vehículo.
Los hechos sucedieron durante la hora punta de tráfico de la tarde del 1 de julio, indicó Urmson.
Se trata del decimocuarto accidente que los más de veinte vehículos sin conductor de Google han sufrido durante los seis años que la compañía lleva probándolos en California, pero el primero de ellos en el que alguien resulta herido.
El coche que se conduce solo de Google es un proyecto iniciado en 2009 con la vista puesta en el largo plazo, aunque desde entonces sus dos docenas de Lexus RX450h equipados con sensores ya han circulado -y, por tanto, registrado en mapas 3D- hasta 2.7 millones de kilómetros, fundamentalmente en autopistas y carreteras.
Además, desde hace aproximadamente dos años, los coches de Google también han estado circulando por las calles de Mountain View, donde el gigante tecnológico tiene su sede.
En caso de salir adelante, el proyecto de Google deberá encontrar un encaje en el actual código de circulación, que en ningún caso contempla la posibilidad de vehículos que circulen sin conductor.