WASHINGTON. Reguladores federales electorales publicaron el miércoles nuevos detalles sobre la riqueza y haberes financieros del precandidato presidencial republicano y célebre empresario Donald Trump, semanas después de que él calculó su fortuna neta en aproximadamente 10 mil millones de dólares.
Trump, quien es considerado ampliamente como el hombre más acaudalado que compite por la presidencia de Estados Unidos, tiene posiciones de liderazgo en más de 500 entidades comerciales, según su informe de finanzas personales de 92 páginas, un reporte que es exigido a todos los candidatos y precandidatos a la presidencia.
Aunque los documentos no prueban ni contradicen los cálculos de Trump, incluso una lectura conservadora de su ingreso anual —muy por arriba de 250 millones de dólares— muestra que está más que equipado para financiar personalmente una campaña presidencial muy costosa.
Aunque la mayoría de los precandidatos republicanos buscan recabar las decenas de millones de dólares necesarias para sostener incluso una competencia primaria básica, la única limitación financiera de la campaña de Trump es su disposición para gastar su fortuna. Hasta ahora, él ha prestado a su campaña 1.8 millones de dólares y se ha jactado diciendo: “No estoy utilizando donadores”.
El reporte muestra que sus activos valen más de mil 400 millones de dólares, incluyendo al menos 70 millones de dólares en acciones. Trump tiene deudas por al menos 240 millones de dólares.
Es imposible decir a partir de los documentos cuál es exactamente el monto de la fortuna de Trump porque las cifras están detalladas en rangos amplios, y la principal categoría es “más de 50 millones de dólares”. Trump se ha quejado de que los formularios no son adecuados para reflejar su riqueza.
El formulario muestra que las posesiones inmobiliarias son la parte fundamental de sus activos y proporcionan la mayor parte de sus ingresos, y que una variedad amplia de marcas y acuerdos comerciales que proporcionan decenas de millones de dólares más. Los acuerdos incluyen más de un millón de dólares por pago de derechos del uso del nombre Trump en Turquía, al menos un millón de dólares por regalías de derecho de uso de marca de ropa para caballeros y cinco millones de dólares de un urbanizador en Panamá.
Trump tampoco desdeña oportunidades de negocio más pequeñas, como un contrato de patrocinio de una bebida israelí que vale entre 50 mil y 100 mil dólares, y compromisos de discursos por 50 mil dólares.