KABUL. La presidencia de Afganistán confirmó que el líder supremo del movimiento Talibán, el mulá Muhammad Omar, murió en abril de 2013 en Pakistán, y aprovechó para llamar a los grupos armados a unirse al proceso de paz.
El gobierno afgano confirmó el deceso en un comunicado emitido al anochecer de este miércoles, horas después de que el portavoz adjunto del presidente Ashsra Ghani, anunció que se investigaron los reportes sobre su muerte y se haría un anuncio oficial.
The Govt of the IRA, based on credible information, confirms that Mullah Mohammad Omar, leader of the Taliban died in April 2013 in Pakistan
— ارګ (@ARG_AFG) julio 29, 2015
Haseeb Sediqi, portavoz de la agencia de inteligencia del país, también confirmó la muerte del líder talibán y precisó que el deceso ocurrió debido a problemas de salud en un hospital de Karachi, la más poblada de Pakistán, en abril de 2013.
La confirmación oficial pone punto final a las especulaciones que suscitó el grupo Fidaee Mahaz, escindido de los talibanes, cuando la semana pasada declaró haber asesinado al mulá Omar dos años atrás y que su cuerpo había sido enterrado en la provincia afgana de Kabul.
Posteriormente, el periódico afgano The Express informó que la causa real de la muerte del solitario jefe talibán fue tuberculosis y que sólo algunos miembros de alto rango en el grupo lo sabían.
Hasta ahora, el grupo armado no ha confirmado la muerte de su líder, quien no ha sido visto en público desde el año 2001 cuando la invasión liderada por Estados Unidos en Afganistán derrocó al gobierno Talibán, pero se espera que podría pronunciarse en las próximas horas.
“El gobierno de Afganistán estima que el terreno para las conversaciones de paz está pavimentado ahora más que nunca, y llamamos a todos los grupos armados a unirse al proceso de paz”, agregó la Presidencia en su declaración.
El gobierno afgano y los talibanes se reunirán dentro de dos días en Pakistán para sostener una segunda ronda de conversaciones de paz.
El movimiento Talibán ha sufrido profundas divisiones debido a crecientes luchas de poder entre sus miembros, y a la influencia del grupo yihadista Estado Islámico (EI), un rival ideológico.
Bajo el liderazgo del mulá Omar, el Talibán gobernó Afganistán entre 1996 y 2001, cuando el régimen de línea dura fue derrocado por las tropas estadunidenses después de que Washington lo acusó de dar refugio al líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, y negarse a entregarlo.