LONDRES. Una vacuna experimental probada en miles de personas expuestas al ébola en Guinea parece estar funcionando y podría auxiliar en la erradicación de la epidemia que actualmente azota al occidente de África, de acuerdo con resultados de un estudio publicado el viernes.
Actualmente no hay tratamiento autorizado o vacuna para el ébola, que hasta ahora ha causado la muerte de más de 11 mil personas en África occidental desde que el año pasado comenzó el brote más grande del mundo en la región forestal de Guinea. Los casos han disminuido drásticamente en meses recientes en los otros dos países en que más ha afectado: Sierra Leona y Liberia.
“Si se demuestra su efectividad, esto va a cambiar el panorama”, dijo la doctora Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud, que patrocinó el estudio. “Va a cambiar la manera de manejar este brote y futuros brotes”.
Desde hace años los científicos tratan de elaborar tratamientos y vacunas para el ébola, pero enfrentan muchos obstáculos, entre ellos la naturaleza esporádica de los brotes y la falta de fondos. Muchos intentos previos han fracasado, incluyendo un cóctel de drogas recientemente abandonado que estaba siendo ensayado en África occidental por Tekmira Pharmaceuticals.
El estudio involucró a varias miles de personas que habían estado cerca de nuevos pacientes de ébola o habían tenido un contacto cercano con uno. Fueron seleccionados al azar para recibir la vacuna de inmediato o tres semanas después.
Los investigadores empezaron a rastrear resultados 10 días después de que formaron los grupos a fin de dar tiempo para descartar a cualquier persona que podría haber albergado el virus cuando el estudio inició.
Después de ese punto, ninguna de las personas entre el grupo de los vacunados inmediatamente presentó ébola, mientras que se registraron 16 casos entre los inoculados después de 21 días.
La vacuna, creada por el gobierno canadiense, ha sido licenciada al laboratorio Merck, pero no ha sido aprobada por los reguladores. El estudio apareció el viernes en la versión digital de la revista Lancet.
Por el momento, los funcionarios creen que la vacuna sólo sería usada una vez que el brote comience, para proteger a quienes tengan alto riesgo; no hay planes para presentar campañas de vacunación masiva como las del sarampión o la polio o para crear enormes reservas de las vacunas.
Merck, con sede en Kenilworth, Nueva Jersey, subrayó que su vacuna se encuentra en lo que normalmente es la ronda final de las pruebas en humanos en Sierra Leona, y en una etapa intermedia de prueba en Liberia.
Un grupo de expertos que vigila los datos del estudio recomendó que se detuviera el ensayo el 26 de julio para que todas las personas expuestas al ébola en Guinea pudieran ser inmunizadas.
La vacuna utiliza una proteína del ébola para provocar un ataque del sistema inmunitario al virus.
“Parecería tan segura como la vacuna contra la gripa”, dijo Ben Neuman, un virólogo de la Universidad de Reading que no participó del estudio. Los investigadores siguen estudiando los posibles efectos colaterales; los más graves aparentemente fueron la fiebre y el estrés provocado por la idea de que los síntomas se debían al ébola.
“Esta (vacuna) podría ser la clave que nos ha hecho falta para poner fin al brote”, dijo Neuman. “No veo ninguna razón con base humanitaria por la que no debería ser usada inmediatamente”.
Neuman dijo que se necesitan nuevos estudios para determinar si también se puede inocular a embarazadas, niños y adolescentes; esos ensayos ya han comenzado. Tampoco se sabe con certeza cuánto duraría la protección.
La especialista en vacunas de la OMS Marie-Paule Kieny dijo que una inmunización eficaz podría evitar futuros desastres, pero que la autorización de la vacuna tomará varios meses.