ORIZABA. Luis Ángel Bravo Contreras, fiscal general del estado de Veracruz, explicó que en los hechos ocurridos esta madrugada en el bar La Taberna ubicado en Orizaba, donde fueron asesinadas seis personas, los agresores abrieron fuego directamente contra las víctimas.

 

En un comunicado, el funcionario mencionó que dentro del grupo de víctimas, dos personas tenían armas de fuego: una pistola escuadra Pietro Beretta, calibre 9 milímetros, que fue percutida en su totalidad en un intento por repeler el ataque, además de una Springfield del mismo calibre, que también fue disparada.

 

El fiscal precisó que, de acuerdo con testimonios, otros dos reporteros de un diario local, que cubren la fuente policial se encontraban en el mismo lugar, aunque no en convivencia con el grupo agredido.

 

En el lugar de los hechos, dentro de las diligencias practicadas por los peritos en criminalística de campo, se contabilizaron más de 70 casquillos percutidos calibre 2.23, de armas AR-15, y registraron 62 impactos en techos y ventanas.

 

Bravo Contreras enfatizó que las investigaciones se encuentran en curso y aún no es posible determinar si alguno de los agresores resultó lesionado, mientras que los elementos de seguridad, incluidas las fuerzas armadas que confluyen en la Operación Coordinada Veracruz Seguro, realizan el rastreo de los delincuentes.

 

Esta madrugada, fueron ejecutadas seis personas en un bar de esta ciudad, entre quienes se encuentra José Márquez Balderas, apodado El Chichi, identificado como jefe de plaza del grupo delincuencial autodenominado Los Zetas, así como el reportero Juan Heriberto Santos Cabrera.  DM