El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha recuperado unos tres mil millones de pesos como resultado de la publicación de listas definitivas de empresas que facturan operaciones inexistentes, acción que ha permitido la aprehensión de tres personas por el delito de defraudación fiscal.
Con la nueva atribución que le dio la reforma fiscal para publicar estas listas a partir de 2014, a la fecha el SAT ha comprobado en definitiva que 367 empresas facturaron operaciones simuladas por 215 mil 518 millones de pesos, en beneficio de 23 mil 956 empresas relacionadas.
El administrador general de Auditoría Fiscal del SAT, José Genaro Ernesto Luna Vargas, destacó que tras la publicación de estas listas en 2014, los montos de facturación de operaciones inexistentes muestran una tendencia descendente, pues se redujeron a la mitad respecto a 2013 y este año continúan a la baja.
Expuso que este esquema de evasión conocido como “operación carrusel” le ha causado un fuerte daño al erario federal, pero resaltó que la reforma fiscal le dio nuevas atribuciones y elementos al SAT para combatirlo de manera más eficaz.
Con la reforma fiscal se adicionó el artículo 69-B al Código Fiscal de la Federación (CFF), el cual establece, como excepción a la reserva fiscal, que el SAT publicará los datos de las empresas que se presume facturan operaciones inexistentes, con el objetivo de combatir este delito fiscal.
Por un lado, una empresa emisora de comprobantes fiscales, factura una supuesta enajenación de mercancías, bienes o servicios y, por otro, la empresa beneficiaria del esquema compra supuestamente el servicio o recibe los bienes.
Si bien la factura cumple con todos los requisitos legales, detrás de ella hay una operación inexistente o simulada, pues la empresa que facturó no cuenta con activos, personal, infraestructura o capacidad material para prestar los servicios o producir, comercializar o entregar los bienes que amparan tales comprobantes.
Así, desde inicios de 2014, el SAT publica en su página de Internet y en el Diario Oficial las notificaciones a los contribuyentes que al parecer simulan operaciones y emiten facturas apócrifas, los cuales tienen un plazo de 15 días para aclarar su situación y, en máximo cinco días, el organismo valora las pruebas y emite la resolución.
Posterior a esa fecha todavía hay un plazo de 30 días más para que el organismo resuelva y publique una relación definitiva de quienes no hayan desvirtuado las observaciones, al considerar que simularon operaciones y emitieron facturas sin efecto fiscal.
En entrevista con Notimex, Luna Vargas refirió que de 2010 al primer semestre de 2015, el SAT ha identificado a mil 557 empresas que emiten facturas, las cuales han facturado un total de 501 mil 581 millones de pesos.
Estimó que si el monto facturado fuera por operaciones inexistentes, el daño al fisco sería de 118 mil 948 millones de pesos por concepto de Impuesto sobre la Renta (ISR) y de 63 mil 439 millones de pesos para efectos del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Informó que, con base en el Artículo 69 B del CFF, el SAT ha publicado a la fecha un total de 19 listados con 831 contribuyentes que se presume o en definitiva emiten facturas apócrifas que amparan operaciones simuladas o inexistentes.
De acuerdo con el funcionario, se identificó que estas facturadoras están vinculadas con 54 mil 200 empresas que se benefician de este esquema de evasión, al utilizar facturas apócrifas para comprobar gastos sin haberlos realizados y deducir este tipo de operaciones inexistentes.
El administrador general de Auditoría Fiscal del SAT informó que el monto acumulado de estas operaciones simuladas es de 396 mil 493 millones de pesos, de 2010 al primer semestre del presente año.
Precisó que de estos 831 contribuyentes, el organismo ya ha publicado también listados definitivos con 367 que expidieron facturas apócrifas y tuvieron operaciones con 23 mil 856 empresas por un monto de 215 mil 518 millones de pesos.
“A la fecha los efectos de estas 19 publicaciones han dado un efecto recaudatorio de alrededor de los tres mil millones de pesos”, explicó Luna Vargas, al precisar que sólo nueve contribuyentes han podido desvirtuar la presunción de que simulaban operaciones inexistentes.
Dijo que este monto recuperado por el organismo fiscalizador es resultado de la autocorrección de las empresas que deducen las operaciones mediante la presentación de declaraciones complementarias, así como de la eliminación de los efectos fiscales de las facturas apócrifas a través de auditorías.
Destacó que la tecnología le permite ahora al SAT diseñar modelos de riesgo para detectar a empresas que emiten facturas que amparan operaciones inexistentes desde su inscripción al Registro Federal de Contribuyentes.
Además, la facturación electrónica, obligatoria desde 2014 como único esquema válido de comprobación fiscal en el país, permite darle un seguimiento puntual a cada uno de los comprobantes fiscales que emiten este tipo de empresas.
En el ejercicio de sus facultades de comprobación, el SAT verifica también domicilios fiscales que el modelo de riesgo arroja que están vinculados con este tipo de esquemas agresivos, acción con la cual ha llegado a detectar que hay hasta mil 500 contribuyentes domiciliados en cuartos de dos por dos.
Resaltó que con todas estas acciones que ha emprendido el SAT para combatir y minimizar este esquema de evasión, los montos por la facturación de operaciones inexistentes ya muestra una tendencia descendente entre el universo de mil 557 empresas que emiten facturas.
Así, expuso, en 2010 estas empresas representaron un total de 50 mil 341 millones de pesos; en 2011, 73 mil 901 millones; 2012, 108 mil 732 millones (considerado el año pico) y en 2013, 102 mil 95 millones de pesos.
Para 2014, cuando el SAT ejerció su facultad de publicar listas de facturadoras de operaciones inexistentes, el monto fue de 60 mil 213 millones de pesos, prácticamente la mitad respecto al año previo, y en el primer semestre de 2015, sólo hay operaciones por mil 201 millones de pesos.
Luna Vargas apuntó que esto muestra una tendencia a la baja, porque quizá las que realizan este tipo de fraudes se “mudan” a otro tipo de empresas u operaciones, pero también porque combatir este delito les cancela o revoca su certificado de sello digital, de manera que no puede seguir haciendo este tipo de operaciones.
“Hoy la reforma fiscal nos da elementos para combatir de manera mucho más eficaz este tipo de fenómenos fiscales que la verdad tanto daño han causado al erario federal”, manifestó.
Informó que tan sólo este año, el Ministerio Público ha otorgado 16 órdenes de aprehensión por el delito de defraudación fiscal, de las cuales tres casos están relacionadas con este esquema de facturación de operaciones inexistentes, y la Policía Federal ya ejecutó las detenciones.
“Estamos trabajando con las autoridades, como la Procuraduría General de la República y la Policía Federal, en caso de detenciones, para seguir mandando señales donde quede claro que el Estado mexicano está dispuesto a combatir con todos sus elemento este tipo de prácticas”, advirtió.
El funcionario del SAT informó que el Código Fiscal de la Federación establece que este es un delito tipificado como defraudación, tanto para quien compra las facturas como para quien las emite, y las penas van desde tres meses a seis años de prisión.
Por último, invitó a los contribuyentes en general a que revisen los listados de las empresas que emiten facturas que amparan operaciones inexistentes y evitar la utilización de estos comprobantes fiscales para que no caigan en un delito.