Hasta el momento, 14 personas, incluidos miembros del comité ejecutivo, están siendo acusadas de recibir sobornos y comisiones cercanas a los 150 millones de dólares durante un periodo de 24 años.
Por su parte, las investigaciones de la justicia suiza se centraron en el proceso de adjudicación de los mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y a Qatar, respectivamente.
Según las estadísticas de la propia FIFA, publicadas por la Cadena BBC, entre los años 2011 y 2014, la organización tuvo ingresos por cinco mil 718 millones de dólares (mdd), y los egresos fueron de cinco mil 380 millones de dólares, conservando una ganancia operativa neta de 338 millones de dólares.
A partir de estas cifras, y de las notas mediáticas, la investigación dirigida por Estados Unidos se centra en los presuntos casos de corrupción entre los miembros de la Confederación Centroamericana y del Caribe de Fútbol (Concacaf) y la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
Cuatro años antes del Mundial de Brasil, cada federación nacional recibió cerca de dos millones de dólares de la FIFA y las confederaciones continentales, como la Concacaf, recibieron 17.5 millones de dólares. Así que el total recibido en las organizaciones relacionadas con la FIFA entre 2011 y 2014 fue cercano a los 137 millones de dólares.
Las eliminatorias y el torneo en Brasil significaron un ingreso cercano a los cuatro mil 800 millones de dólares y, después de los egresos, le quedó una ganancia cercana a los dos mil millones de dólares.
Los ingresos de la FIFA provinieron de:
– Transmisiones y derechos de televisión: dos mil 400 mdd
– Patrocinios: un mil 600 mdd
– Entradas a los estadios: 527 mdd
– Hospitalidad por cortesía: 184 mdd
– Valor de los derechos de licencia: 107 mdd
La FIFA reinvierte la mayoría de sus ganancias, pero solo lo hace en proporción a que le produzca dinero para el ahorro.
El valor de ese ahorro ha crecido de forma consistente en la última década desde 350 mdd en 2005 hasta unos mil 500 mdd en 2014. Ahora, las acusaciones de corrupción se refieren a un monto de 150 mdd durante un período de 20 años. Eso equivale a cerca del 10 por ciento del dinero que la FIFA utiliza para emergencias.
Para finalizar, mencionaré lo referente a los acusados de las áreas de Concacaf y Conmebol.
“Corrupción rampante, sistemática y profundamente enraizada” es la descripción que hizo en rueda de prensa la fiscal general de Estados Unidos, Loretta Lynch, para referirse al caso. Detalló ejemplos de las irregularidades descubiertas por el departamento de Justicia:
– Pago y recepción de sobornos a cambio de los derechos comerciales de partidos de las eliminatorias de la Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe de Futbol Asociación (Concacaf) para la clasificación de la Copa del Mundo, la Copa de Oro de la Concacaf, la Liga de Campeones de la Concacaf, la Copa América de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), la Copa Libertadores de la Conmebol, y la Copa de Brasil organizada por la Federación Nacional de Fútbol de Brasil (CBF).
– El proceso de elección de Sudáfrica como sede del Mundial de 2010. Según dijo Lynch, los implicados “corrompieron el proceso a través de sobornos para influir en la decisión” del país anfitrión.
– El proceso de elección del actual presidente de la FIFA, Joseph Blatter, en 2011.
– Acuerdos relativos al patrocinio de la selección brasileña por una compañía de deportes estadunidense (Traffic Sports).
Loretta Lynch indicó que los investigadores descubrieron 110 mdd en sobornos relacionados con la planificación de la Copa América Centenario de 2016, organizada para conmemorar el centenario del torneo y que se realizará por primera vez en territorio de los Estados Unidos.
“En resumen, estos individuos y organizaciones incurrieron en sobornos para decidir quién televisaría los partidos, dónde tendrían lugar y quién controlaría la organización que supervisa el fútbol a nivel mundial”, denunció Lynch.
Los imputados se enfrentan a un máximo de 20 años de prisión por asociación delictiva, fraude en transferencias, lavado de dinero y obstrucción a la justicia.
Además, Eugenio Figueredo, entre los arrestados en Suiza, se enfrenta a una posible condena adicional de 10 años de cárcel por un cargo de fraude de naturalización y se le podría retirar la ciudadanía estadunidense.
El ex futbolista presidió la Asociación Uruguaya de Fútbol entre 1997 y 2006, fue vicepresidente de la Conmebol entre 1993 y 2013, presidente del comité organizador del Mundial Brasil 2014 y terminó como miembro del Ejecutivo de la FIFA.
Las autoridades estadunidenses advirtieron que la investigación sigue adelante, en un compromiso por erradicar la corrupción en el fútbol y terminar con una situación en la que las víctimas, dijo Loretta Lynch, “son una multitud de competiciones y torneos de países en desarrollo que deberían haberse beneficiado de los ingresos generados con la comercialización de los citados derechos y los aficionados en Estados Unidos y en todo el mundo”.