MOSCÚ. La esperada aventura veraniega y al mismo tiempo exploradora del presidente ruso, Vladímir Putin, tiene lugar en Crimea.
El mandatario ruso se subió a bordo de un batiscafo para sumergirse en las aguas de la bahía de Balaklava y observar los restos de un antiguo galeón a 83 metros de profundidad.
“Un objeto muy interesante, que aún debe ser investigado. Pertenece aproximadamente a los siglos X-XI, una época que coincide con el surgimiento del Estado ruso, el desarrollo de las relaciones con Bizancio”, dijo Putin después de la inmersión.