Mexicana de Aviación ha perdido tres cuartas partes de su valor desde que suspendió operaciones. El avalúo que se tenía en 2010 para los activos de la empresa ascendía a siete mil millones de pesos, hoy en día equivale a mil 700 millones.
Las cifras corresponden a los avalúos realizados por el síndico encargado del proceso de quiebra de Mexicana, Alfonso Ascencio Triujeque, según comentó el representante legal de los ex empleados de la compañía, Joaquín Ortega.
El abogado agregó que entre los bienes que tomó en cuenta el síndico para estimar el valor de la compañía aérea no se consideraron el título de concesión ni los derechos derivados de éste, como el caso de los slots (horarios de despegues y aterrizajes); tampoco tomó en cuenta las marcas.
De igual modo, el abogado señaló que el valor actual de la empresa equivale a 14.1% de los pasivos laborales que suma Mexicana, es decir, lo que adeuda de liquidaciones.
“Los pasivos laborales cuando dejó de volar la compañía, constituidos por la expectativa de liquidación de los trabajadores, valían 4 mil 875 millones de pesos. Cinco años después ascienden a 12 mil millones, porque son cinco años de salarios caídos”, comentó Ortega.
El abogado añadió que los ex trabajadores reclaman el título de concesión y los derechos derivados de éste, ya que sólo con eso podrían pagar los pasivos laborales que en este lustro se han triplicado: “Es lo único que tiene valor. Se puede vender un paquete de slots en un muy buen precio”.
Aviones en tierra
El día que Mexicana de Aviación dejó de volar contaba con 112 aviones arrendados y nueve propios, estos últimos son hoy en día propiedad del fideicomiso que se constituyó con la base de mantenimiento MRO en beneficio de los trabajadores.
Los nueve aviones Airbus A320 tienen cinco años en estado de conservación, por lo que su valor comercial ya es bajo, y aunque no se tiene un avalúo certero del costo de estas aeronaves, los trabajadores buscan que se vendan a buen precio ya que son modelos que todavía se utilizan para vuelos cortos, comentó Joaquín Ortega en entrevista telefónica.