ROMA/ZAGREB/BUDAPEST. Cerca de cincuenta cadáveres fueron recuperados del interior de la bodega de un barco en el que viajaban junto con otros 400 inmigrantes que fueron rescatados frente a las costas de Libia.
Así lo confirmó una fuente de la Guardia Costera italiana que explicó que las operaciones de socorro se han efectuado gracias a la unidad sueca Poseidón, que participa en el dispositivo europeo Tritón.
La misma fuente informó de que en las últimas horas se han desplegado en el Mediterráneo diez operaciones de salvamento, de las que cinco ya han concluido con el rescate de más de mil 400 personas.
La nave Fiorillo de la Guardia Costera italiana ha auxiliado a 112 personas y ha recuperado un cadáver en una embarcación que se encontraba a la deriva, mientras que un mercantil ha rescatado a otros 225 inmigrantes.
Además, una unidad irlandesa, incluida en el dispositivo Tritón, ha puesto a salvo a un grupo de cerca de 500 personas, y la nave sueca Poseidón, que ha sido la que ha encontrado estos 50 cadáveres, ha efectuado dos rescates, uno en un barco y otro una lancha neumática, en los que ha salvado en total a 569 personas, incluidas las 400 de esta última tragedia en el mar.
Paralelamente, continúa la llegada de inmigrantes socorridos a los puertos de Italia.
Ayer, un grupo de 218 inmigrantes llegó al puerto siciliano de Catania junto con el cadáver de un sudanés que falleció a causa de la diabetes agravada por las difíciles condiciones del viaje, informó hoy la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Las autoridades de Serbia informaron de que en las últimas 24 horas llegaron más de dos mil refugiados al norte del país, fronterizo con Hungría, mientras que el Gobierno reclamó más ayudas a la Unión Europea (UE) y prohibió una manifestación contra los inmigrantes convocada para el lunes.
Según la agencia de noticias serbia Tanjug, el martes llegaron unos 50 camiones a la ciudad limítrofe de Kanjiza con unas mil 800 personas a bordo, al tiempo que otros centenares de refugiados lo hicieron a la cercana localidad de Subotica.
Por su parte, Hungría anunció que reforzará su frontera meridional con el despliegue adicional de más de dos mil policías y varios helicópteros a partir del 15 de septiembre, mientras el partido conservador gobernante ha iniciado un proceso legal para movilizar al Ejército.
Estos pasos se tomaron después de que las fuerzas de seguridad registraran la entrada récord este año de dos mil 533inmigrantes en un sólo día, la mayoría de ellos refugiados de Siria y Afganistán.
En el centro de acogida de refugiados de Röszke, cerca de la frontera con Serbia, la policía empleó gases lacrimógenos para dispersar a unas 200 personas que protestaban por la lentitud de los trámites, según la agencia de noticias MTI.
Viena acogerá hoy una cumbre de los Balcanes occidentales centrada en la actual crisis de los refugiados y a la que asistirán también la canciller alemana, Angela Merkel, y la responsable de Política Exterior de la UE, Federica Mogherini.