MIAMI. La península de Florida, en el sureste de Estados Unidos, fue puesta hoy bajo estado de emergencia ante el pronóstico del impacto directo de la tormenta Erika durante los primeros días de la próxima semana.
El gobernador de Florida, Rick Scott, dijo en una orden ejecutiva que la tormenta pasará por “la espina” de la península y “soy responsable de conocer los peligros que se presentan a este estado y su población”.
Scott conminó a la población de Florida, el tercer estado más grande del país con una población de 19.8 millones de habitantes, a tomar “precauciones anticipadas para proteger a las comunidades e infraestructura críticas”.
En su boletín de las 11:00 horas locales (15:00 GMT), el Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami, indicó que Erika se encuentra a 105 kilómetros al sur-sureste de Santo Domingo, República Dominicana.
La tormenta tiene vientos máximos sostenidos de 85 kilómetros por hora, pero se espera que reduzca su potencia tras cruzar República Dominicana, de sureste a noreste, en las próximas horas.
Erika se desplaza a una velocidad de 30 kilómetros por hora y se pronostica que en las próximas horas deje en el norte de Cuba, Islas Vírgenes, Puerto Rico, República Dominicana, Haití, Islas Turcas y Caicos y Bahamas “lluvias que podrían provocar deslaves y víctimas mortales”.
El gobernador de Florida prevé activar la Guardia Nacional y autoriza en su orden ejecutiva la evacuación de condados y la apertura de albergues, así como la llegada de suministros de ayuda.
Funcionarios del servicio de aguas y alcantarillado del condado Miami-Dade dijeron que decidirán este viernes si reducen las aguas de los canales para controlar potenciales inundaciones.
En la isla de Dominica la tormenta es responsable de al menos 12 muertes, según un reporte esta mañana del canal NBC News.
El primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit, publicó fotos de los daños de la tormenta en su página de Facebook. Entre las fotos figuran algunas de una carretera colapsada, coches sumergidos y las inundaciones en el aeropuerto Douglas-Charles.
Erika es la quinta tormenta de la temporada de huracanes en la cuenca atlántica que inició el pasado 1 de junio: Ana, Bill, Claudette y Danny, que fue un huracán de categoría tres, estuvieron antes.