WASHINGTON. El embajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, anunció hoy que el Gobierno de su país no quiere abordar la crisis fronteriza con Colombia en la reunión de consulta de cancilleres de todo el continente propuesta por el país andino.
“Mi Gobierno no es partidario de debatir este tema en la OEA por su lamentable y frustrante historia ante situaciones complejas entre los Estados miembros“, dijo Chaderton.
Colombia exige a OEA no guarde silencio ante crisis fronteriza
La Misión de Colombia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) exigió hoy al Consejo Permanente del organismo que emita una “pronta reacción” sobre la crisis fronteriza con Venezuela y pidió que no se mantenga al margen ni guarde silencio ante esa “grave situación humanitaria”.
“Venimos adoloridos, ultrajados, indignados. Hemos visto atónitos la deportación arbitraria y el maltrato a compatriotas (por parte de Venezuela) solo por el hecho de ser colombianos y de no tener sus papeles en regla”, dijo hoy el embajador colombiano ante la OEA, Andrés González.
Con estas palabras arrancó el Consejo Permanente extraordinario que la OEA celebra hoy, a petición de Colombia, para debatir si se convoca una Reunión de Consulta de cancilleres de todo el continente que aborde la crisis fronteriza con Venezuela.
Colombia busca exponer ante los ministros de Exteriores la crisis humanitaria desatada por la deportación de más de un millar de sus ciudadanos que vivían en el estado venezolano de Táchira, además de los 7.162 que habrían abandonado el país voluntariamente, según cifras oficiales.
“Allanar las viviendas, sacarlos a la fuerza, separar a las familias, no dejarles sacar sus propios bienes y marcar las casas, marcar las casas ¡Por dios!, para luego demolerlas”, describió en una apasionada intervención el embajador colombiano ante la OEA.
“Estos son actos inaceptables que recuerdan episodios amargos de la humanidad que no pueden repetirse y menos en el nuevo mundo de la democracia y la gente libre”, añadió.
La crisis arrancó cuando el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó cerrar un tramo de unos 160 de los 2.200 kilómetros de la frontera entre Colombia y Venezuela con el argumento de combatir el contrabando y a supuestos paramilitares.
Colombia quiere una reunión de ministros de Exteriores en el único organismo que aglutina a todos los países del continente (salvo Cuba), lo más pronto posible, para denunciar que “las deportaciones colectivas no se ajustan al derecho internacional y requieren un debido proceso, unos estándares”.
“Las reuniones de otros foros son bienvenidas, pero este tema le corresponde a toda América, los derechos humanos existen en todo el continente, por eso es indispensable que todos los países se expresen ante este tema absolutamente global e impostergable”, defendió González.
La canciller colombiana, María Ángela Holguín, anunció hace unos días una reunión el próximo 3 de septiembre de los ministros de Exteriores de los países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en su sede en Ecuador.
Falta por ver si Venezuela acepta también que se aborde el tema en el seno de la OEA, un organismo al que ese país critica con dureza por considerar que obedece a los intereses de Estados Unidos.