La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) descartó que el tipo de cambio del peso frente al dólar impacte en los precios de los vehículos que se venden en el país.
El director general adjunto del organismo, Guillermo Rosales, dijo que la inestabilidad en el mercado cambiario en el último año “no ha sido trasladada a los precios en la economía mexicana, prueba de ello es que tenemos los índices de inflación más bajos de lo que se tiene registro y tampoco se ha trasladado a los precios de los vehículos”.
Recordó en entrevista que los precios de los vehículos en el país están aún con niveles inflacionarios por debajo del nivel promedio de la variación general.
De acuerdo con el directivo, mientras la variación inflacionaria en el precio de vehículos nuevos es de 2.55 por ciento, el comportamiento de la inflación al mismo mes de junio reportó una variación anual de 2.87 por ciento.
“Esto quiere decir que los precios de los vehículos continúan siendo más bajos en términos reales, puesto que su variación se encuentra por debajo de la inflación”, insistió.
Refirió que los precios de los vehículos en México han crecido por debajo de la inflación, lo que es atribuible a la competencia extrema en el mercado mexicano, es decir, al número de marcas, a lo cual se suma las ofertas de crédito, situaciones que favorecen al consumidor.
“Esto nos da una perspectiva de lo que está ocurriendo en el mercado”, pero esto no quiere decir que todos los modelos, todas las versiones y todas las marcas tengan el mismo comportamiento, precisó.
Los precios de los vehículos están determinados por múltiples factores que evalúan los fabricantes para establecer sus políticas comerciales, aclaró.
Lo que en este momento impera, sin embargo, es la incertidumbre, “pero los datos duros, lo que nos dicen, es que no hemos tenido un reflejo en variaciones significativas en los precios”, argumentó.
El directivo precisó que no todo lo que la industria adquiere como insumos se opera en dólares, en tanto que los fabricantes en México sí exportan en dólares, por lo que la utilidad final se mantiene favorable.
Por lo tanto, en este momento no se puede afirmar que habrá un incremento significativo o generalizado y mucho menos inminente de los precios de los vehículos en México, producto de la inestabilidad cambiaria, añadió.