WASHINGTON. La fiscal de Charleston, Carolina del Sur, Scarlett Wilson anunció hoy que pedirá la pena de muerte para Dylann Roof, acusado de matar en junio a nueve feligreses negros en una histórica iglesia de la localidad.
“Este fue el peor de los crímenes, y la Justicia en nuestro estado pide el peor de los castigos”, indicó Wilson en una conferencia de prensa, quien reconoció que varios de los familiares de las víctimas han expresado su voluntad de perdonar a Roof.
“El perdón no significa necesariamente que se eviten las consecuencias, incluso consecuencias severas”, apuntó la letrada.
Roof, de 21 años, mató a nueve feligreses negros en una iglesia metodista de Charleston el pasado 17 de junio y se dio a la fuga, hasta ser detenido un día después y puesto a disposición judicial.
El acusado había expresado ideas racistas en internet y simpatizaba con movimientos supremacistas blancos.
Andy Savage, abogado de algunas de las familias de los fallecidos y de tres heridos, indicó que sus clientes no creen en la pena de muerte “por motivos religiosos”, pero que al mismo tiempo “reconocen que las necesidades del estado son distintas”.
Roof tendrá que responder a nueve cargos por asesinato, tres de intento de asesinato y otro por portar armas, en un juicio cuya fecha de inicio se ha fijado para el 11 de julio de 2016.
Según la Justicia estadounidense, Roof comenzó a planear los asesinatos “meses antes” de la noche de la tragedia con el objetivo de “aumentar las tensiones raciales de todo el país y buscando venganza por las injusticias que creía que los afroamericanos habían cometido contra los blancos”.