Austria prevé que en las próximas semanas llegarán a su territorio unos 5,000 refugiados que en su mayoría continuarán viaje hacia Alemania y los países escandinavos, dijo hoy el canciller federal de la república alpina, Werner Faymann.

 

“De momento, la amenaza del frío y las vallas y muros anunciados desatan fuertes movimientos (de refugiados)”, dijo el jefe de Gobierno en una rueda de prensa en el marco de una reunión del gabinete a puerta cerrada para tratar la situación de los refugiados en el país.

 

“Tenemos que contar con una media de 5,000 personas cada día y por lo tanto mejorar la logística en nuestra zona”, explicó Faymann.

 

“El ejército asumirá la logística del transporte en el futuro”, añadió.

 

Hace una semana, Austria y Alemania dieron luz verde al acceso a su territorio a miles de refugiados, en su mayoría provenientes de zonas en conflicto en Oriente Medio, que se habían estancado en Hungría.

 

Desde entonces, entre 40.000 y 50.000, según diversas fuentes, llegaron a Alemania pasando por Austria, donde solo poco más de un millar quisieron quedarse y pidieron asilo.

 

A la pregunta de cuándo puede esperarse una distensión de esta crisis, el canciller respondió: “Alemania y Austria van a seguir garantizando el derecho a asilo, la canciller (alemana, Angela) Merkel no ha mencionado un límite máximo”.

 

“Lo que cuenta es un desarrollo bien organizado y coordinado, pues no se pueden detener los flujos de refugiados salvo que se dirijan los rifles contra los solicitantes de asilo. Y algo así no ocurrirá en Alemania, y totalmente seguro es que no pasará en Austria”, subrayó.

 

El político socialdemócrata lamentó que la coordinación con las autoridades húngaras sea mala, y por el contrario se congratuló de la buena cooperación con Alemania, al tiempo que insistió en la necesidad de una solución única de la Unión Europea (UE).

 

Una de las prioridades del gobierno austríaco es ahora lograr que antes de mediados de octubre ningún refugiado duerma a la intemperie o en una tienda, situación en la que actualmente hay unos 2.300 solicitantes de asilo.

 

“Ante el alto número de los que llegan es un gran desafío, pero Austria es suficientemente fuerte”, dijo Faymann al comentar la tarea que queda por hacer.

 

En la reunión, el gobierno adoptó un paquete de medidas para fomentar la integración de los que ya han conseguido el asilo, por un valor total de 75 millones de euros.

 

Ese dinero se destinará sobre todo a cursos de alemán, a la contratación de equipos de especialistas que apoyen a los niños en las escuelas y a sus padres, así como expertos para asesorar y acompañar a los jóvenes.

 

“Ahora se trata de integrar lo mejor posible a los refugiados que tenemos aquí”, dijo el ministro austríaco de Exteriores y de Integración, Sebastian Kurz, en un comunicado.