Con más de 40 modelos de bicicletas de 12 coleccionistas mexicanos, nace la exposición Rodando por los recuerdos, que tiene por objetivo reconocer la importancia de este transporte ecológico desde la infancia de varias generaciones, e incluso en la vida laboral a través de la historia de México.
La muestra inaugurada el fin de semana pasado en el Centro Cultural Amigos de la Letra Impresa, A.C. (ALIAC) en el Centro Histórico, hace un recorrido por los distintos modelos y marcas de bicicletas que se han fabricado o importado a nuestro país.
La exposición se divide en dos secciones. En la primera se podrán apreciar los modelos que se volvieron sellos de la década de los 70, como las icónicas Vagabundo.
La segunda parte está dedicada a los distintos oficios que acompañaron a la clase popular del siglo XX, donde la bicicleta fue parte fundamental para ejercer distintas actividades.
El coleccionista de bicicletas de oficios, Juan José Olvera, y uno de los participantes en esta muestra, comentó a 24 HORAS que la mayoría de las bicicletas se encuentran exactamente de como se encontraron.
Por ejemplo, la bicicleta del panadero cuenta con algunos adornos en los rayos de la rueda de la bici, en forma de rectángulos o estrellas, “le daba un folklore a la vida”.
Aunque en la actualidad estos oficios ya utilizan más motocicletas o camionetas, muchos de ellos continúan haciendo uso de la bicicleta.
Olvera indicó que es en provincia en donde se pueden ver estas bicicletas de oficios, como recordó haber visto una para entregar leche fresca en Pachuca, Hidalgo.
En la Ciudad de México, las bicicletas de oficio más común es la de los tacos de canasta, la del afilador y la del panadero, la cual se modificó un poco usando ahora un triciclo.
Juan José Olvera destacó el uso de la bicicleta como un medio de transporte ecológico, y exhortó a los capitalinos a utilizarla para que se vean beneficiados no sólo en tiempos de traslado al trabajo o escuela, sino también en su salud.
“Son ciclistas por tradición, heredaron el oficio desde la cuna, de sus abuelos, de sus padres, de su familia. Son taqueros, carteros, limpiabotas, afiladores de cuchillos y repartidores. Son los únicos que denotan y marcan respeto ante los vehículos motorizados por la salvaje ciudad de México, porque no son sólo ciclistas y el resto lo sabe, son tradición, son barrio, son identidad, son México en dos ruedas“, se puede leer en un cartel dentro de la exposición.
Rodando por los recuerdos estará abierta hasta el 3 de octubre en el Centro Cultural ALIAC, ubicado en República de El Salvador 60, entre Isabel La Catolíca y Bolivar, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.