NUEVA YORK. Coca-Cola fue notificada por las autoridades fiscales de Estados Unidos de que debe tres mil 300 millones de dólares en impuestos federales, más intereses, correspondientes a ejercicios fiscales de 2007 a 2009, dijo la compañía el viernes.
La empresa de bebidas, con sede en Atlanta, dijo en un informe presentado ante autoridades que cree que la evaluación del Servicio Interno de Impuestos carece de mérito y que planea recurrir a “todos los recursos administrativos y judiciales necesarios para resolver el asunto”.
Coca-Cola dijo que el desacuerdo es sobre qué tanto debe reportar como ingreso gravable en Estados Unidos en relación con las licencias que permiten que sus filiales en el extranjero vendan productos como concentrados de refresco a embotelladores foráneos.
Es un asunto que enfrentan con frecuencia compañías multinacionales, dijo Robert Willens, presidente de una consultora contable de Nueva York. Señaló que las compañías tienden a cobrar a sus subsidiarias extranjeras bajas tarifas por licencias a fin de sacar los ingresos gravables de Estados Unidos, donde los impuestos corporativos son más altos.
Por lo general, los casos se resuelven por una fracción de la cantidad señalada en la evaluación, agregó.
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