DALLAS. El pasador de los Vaqueros de Dallas, Tony Romo, reveló, a través de su cuenta de Twitter, que no necesitará cirugía y, con ello, aunque no es óptimo, el tiempo de su retorno al equipo será de unas ocho semanas y no como en 2010, cuando por una lesión similar se perdió la temporada.
Sin embargo, para que Romo pise el campo podrían necesitar dos semanas adicionales, según los resultados del examen al que fue sometido el estelar jugador en las instalaciones de los Vaqueros en Valley Ranch.
Romo se rompió la clavícula tras una dura tacleada de la que fue objeto en el partido del domingo, en el que derrotaron a las Águilas de Filadelfia.
Jason Garret, entrenador en jefe de los Vaqueros, comentó que Romo no tiene daños estructurales además de la obvia fractura.
La buena noticia para los Vaqueros es que su quarterback regresará cuando faltarán una cinco o seis semanas de la temporada regular y, en el hipotético caso de que su equipo no lo esté pasando muy bien, si mantiene una marca aceptable, podrían rescatar la campaña.
Sin embargo, el pasador suplente Brandon Weeden no despierta mucha confianza. Tiene marca perdedora desde que juega en la NFL y eso ha desatado los rumores de que los de Dallas salieron al mercado para buscar opciones.
Sin embargo, Garret elogió a su jugador. “Brandon hizo un buen trabajo en el partido. Se comportó bien, estuvo equilibrado, ejecutó bien el plan ofensivo”.
La marca de cinco ganados por 16 perdidos no habla bien de él y menos contrastándola con el 77-48 de Romo