El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, consideró que no se debe tomar una decisión apresurada ni anticipada, sin antes conocer experiencias internacionales que ayuden a definir lo que se realizará en torno al cierre del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
“Todo esto es lo que hay que analizar, la posibilidad de la transformación urbanística de la Ciudad de México, de convivencia y por supuesto de perspectiva económica es muy importante, me parece que es una de las más grandes que ha tenido en su historia la ciudad, por eso tenemos que hacerlo bien y por eso tenemos que analizarlo muy bien”, dijo.
El jefe de Gobierno mencionó que también pondrá en una balanza y en análisis los más de dos mil 500 negocios y empresas relacionadas con la terminal capitalina, ya que proporcionan 131 mil empleos en esta zona y casi cuatro mil 500 millones de dólares de derrama económica.
Por lo que celebró la realización del “Foro Internacional Aeropuerto y Ciudad. La Gran Transformación Urbana”, ya que se contará con especialistas de Berlín, Quito, Austin y Seúl, quienes compartirán su experiencia sobre aeropuertos en desuso.
“Qué bueno que a esta convocatoria acudan tantos expertos, no podríamos anticipar una decisión como lo dije, mi obligación, la obligación del gobierno por supuesto es defender a la ciudad, por más que tuviera un proyecto el Gobierno Federal que fuera de urgente necesidad o de gran proyección, si la Ciudad de México estuviera afectada no podríamos permitirlo, no lo podríamos aceptar”, aseguró.
Miguel Ángel Mancera comentó que recientemente se dotó de agua potable a la Terminal 2, debido a que estaba funcionado con pipas de agua, acción que requirió una inversión de más de 10 millones de pesos.
Además, adelantó que a finales del mes, se estarán incorporando dos nuevos vuelos, “con una gestión muy importante de aquí de nuestro secretario de Turismo, pero la noticia es que el aeropuerto se sigue saturando”.
En este sentido, afirmó que se tiene que trabajar en una base muy sólida, contar con la mejor construcción y tener un gran proyección de cómo se verá la ciudad de México.