CARACAS. El alcalde de Caracas y líder opositor venezolano Antonio Ledezma, detenido desde el pasado 19 de febrero, no fue trasladado ante el juez que debe decidir su futuro por falta de vehículos oficiales.
Hay dineros oficiales para que el piloto de Fórmula Uno Pastor Maldonado, auspiciado por la estatal petrolera venezolana, “se los gaste rompiendo vehículos (…) y para trasladar a guardaespaldas y sicarios que cuidan a quienes detentan el poder, pero no hay para trasladar a estos venezolanos que están pidiendo justicia”, declaró su abogado Omar Estacio a los periodistas.
Tras dos meses en una cárcel de Caracas y por motivos de salud, la Justicia ordenó en abril pasado el arresto domiciliario de Ledezma, quien estuvo esperando ser llevado al tribunal “para dar la cara” y negar las acusaciones en su contra, subrayó.
La Fiscalía informó de que la causa en contra de Ledezma guarda relación con el caso de los venezolanos Lorent Gómez Saleh y Gabriel Vallés, expulsados de Colombia en septiembre de 2014 por su presunta vinculación con “planes conspirativos” atribuidos por Caracas al expresidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010).
“Estaba dispuesto a dar la cara. Emplazamos a sus acusadores a que hagan lo mismo: den la cara y no se escondan debajo de las faldas de excusas tan baladíes como estas de que no hay vehículos”, añadió el abogado y recordó que ya suman seis las veces en que se difiere el trámite judicial.
La Asociación de Alcaldes por Venezuela, que aglutina a las autoridades locales opositoras al gobierno de Nicolás Maduro, considera a Ledezma un “preso político” y ha confirmado que los diputados de la oposición que surjan como tales tras los comicios parlamentarios del 6 de diciembre promulgarán una Ley de Amnistía a su favor.
Según informa «El Nacional», la audiencia preliminar del alcalde ha sido suspendida cinco veces más de lo que estipula el artículo 310 del Código Orgánico Procesal Penal (COPP), el cual permite la realización de la audiencia preliminar sin presencia del imputado.