Más de medio millar de mercenarios del Estado Islámico (EI) han abandonado sus posiciones en Siria debido a los bombardeos aéreos rusos, según informó hoy el Estado Mayor del Ejército de este país.

 

“Los servicios de inteligencia han informado de que los guerrilleros abandonan los territorios bajo su control. En sus filas cunde el pánico y la deserción. Cerca de 600 mercenarios han abandonado sus posiciones e intentan llegar a Europa“, dijo Andréi Kartapólov, subjefe del Estado Mayor.

 

El general aseguró a la prensa local que desde que se inició este miércoles la intervención militar rusa en Siria la aviación rusa ha efectuado más de sesenta vuelos y destruido más de 50 objetivos del EI.

 

“En tres días hemos logrado minar la base técnico-militar de los terroristas y también reducir en gran medida su potencial de combate”, dijo.

 

Kartapólov destacó que los cazas, bombarderos y cazabombarderos rusos “han lanzado ataques las 24 horas del día desde la base aérea de Jmeimim (cerca de Latakia) hasta el mismo interior del territorio de Siria”.

 

“Los ataques de nuestra aviación no sólo continuarán, sino que incrementaremos su intensidad”, adelantó.

 

Insistió en que los objetivos rusos son los centros de mando, arsenales, almacenes de munición y explosivos, fábricas de armas, nudos de comunicación y campos de entrenamiento de los grupos terroristas yihadistas.

 

El Gobierno ruso insistió hoy en que el único objetivo de su campaña de bombardeos aéreos en el país árabe es acabar con los yihadistas y de esa forma defender a su pueblo de la amenaza terrorista.

 

“Nosotros defendemos al pueblo de Rusia de la amenaza del terrorismo, ya que siempre es mejor hacerlo en el extranjero que dentro de tus propias fronteras”, dijo hoy el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, al canal de noticias “Rusia 24”.

 

El presidente estadounidense, Barack Obama, denunció ayer que “está claro” que las fuerzas rusas en Siria “no distinguen entre el Estado Islámico y la oposición moderada suní y eso es una receta para el desastre”.

 

“Rechazamos la teoría de Rusia de que cualquiera que esté contra Asad es un terrorista”, señaló.