CHARLESTON. La concentración en la propiedad de los medios de comunicación está perjudicando la libertad de expresión en América Latina, en donde la violencia y el hostigamiento contra los periodistas “ha empeorado”.
Esta es la conclusión que llevó hoy a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) el Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edison Lanza, quien advirtió que “las amenazas y los asesinatos” de periodistas no cesan en gran parte de la región latinoamericana.
Lanza intervino hoy en la asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), donde se refirió de forma específica a Cuba y donde los derechos humanos y la libertad de expresión son violados “absoluta y sistemáticamente” con un Estado que acapara el “monopolio” de los medios.
Lanza denunció la “práctica de encarcelamiento permanente a quienes hacen uso de la manifestación pública como un derecho a la libertad de expresión y mostrar su posición disidente”, y, por supuesto, el hecho, apuntó, de que “los medios de comunicación son un monopolio en manos del Estado” cubano.
El relator de la CIDH se mostró también muy crítico con “la concentración indebida de los medios de comunicación”, que a su juicio tiene un efecto muy negativo para la libertad de expresión y la democracia”, así como para la “creación de contenidos en materia periodística”, puso de relieve el uruguayo.
Se refirió, en concreto, a la concentración de medios en Estados latinoamericanos que “no han conseguido construir modelos y marcos normativos y políticas públicas para abordar eficazmente este problema desde una perspectiva de libertad de expresión”.
Sobre esos casos dijo: en México hay una “gravísima crisis en materia de derechos humanos” que corroe al país, en Ecuador existe una “profundización en el camino del autoritarismo” y en Venezuela el “hostigamiento permanente de los pocos medios independientes que quedan”.
Diseccionó a continuación la “metodología” empleada por el gobierno venezolano para “acaparar medios” que eran de propiedad privada para “transformarlos en medios estatales o públicos”, que, en definitiva, “se han convertido en medios para la promoción del Gobierno” y no de la “diversidad y el pluralismo”.
En la penúltima jornada de la asamblea de la SIP intervino también el subsecretario adjunto de la Oficina para Asuntos del Hemisferio Occidental en el Gobierno de Estados Unidos, Gonzalo Gallegos, quien garantizó el apoyo de la Administración de Barack Obama a los periodistas independientes en Cuba.
En su intervención por vídeo conferencia, Gallegos apuntó que el Gobierno estadounidense busca “formas eficaces” para el logro de la “meta final”: que los cubanos “puedan tener acceso a la información”.
Se mostró convencido, además, de que el restablecimiento de relaciones entre Estados Unidos y Cuba “va a mejorar la vida” en la isla caribeña y potenciará el tránsito de esta nación hacia la “democracia y la prosperidad”.
Gallegos asumió que el proceso va a ser “largo” y “complejo” y que debe primar el “respeto mutuo” entre ambos países sin orillar los debates a la luz pública, aunque reconoció que el “cambio (en Cuba) no va a ser de la noche a la mañana”.