Si bien la relación debe ser respetuosa y de colaboración, pues la Universidad Nacional Autónoma de México no se puede mantener ajena a las circunstancias y problemas del país, también debe existir una sana distancia entre la Rectoría y el gobierno federal, señaló en entrevista la directora de la Facultad de Ciencias y aspirante a ganar la Rectoría de la institución, Rosaura Ruiz.
La académica, científica e investigadora es también la primera mujer que decidió “destaparse” para este proceso, uno en el cual ya tiene experiencia pues ha participado en otras dos ocasiones. En entrevista con 24 HORAS insistió en que la autonomía es fundamental para la construcción de la Universidad del futuro.
¿Ha sido equitativa la competencia en la UNAM?
Muy bien, sí es equitativa. Cada uno tiene su estilo personal, aunque naturalmente hay diferencias. Del lado de la Universidad y del lado de la Junta de Gobierno, me parece que ha sido un proceso ejemplar en tanto que ningún candidato ataca a otro y espero que así siga.
¿Quién es el candidato a vencer?
Hay muchos, la mayoría conoce a la Universidad y son gente que tiene muy buenos planes de trabajo y son competencia todos. Una vez que uno está en esa lista tiene una posibilidad, con porcentajes distintos pero la mayoría tenemos alguna posibilidad de llegar. Algunos tendrán 50%, otros 30%, otros 15% pero la hay para todos.
Por más que se diga que no, académicos y estudiantes señalan que algunos candidatos tienen el apoyo de la Rectoría, de la Presidencia o de ambas.
Me es muy difícil contestar porque no me consta y sería muy atrevido que yo dijera que algunos tienen el apoyo de la Rectoría o del gobierno. No tenemos ninguna evidencia ni prueba de que esto sea así.
¿No cree que hay candidatos oficiales?
No. Sobretodo porque la Junta de Gobierno va a actuar libremente, confío en que analice a cada uno de los candidatos -sus proyectos, trayectoria, los apoyos que tiene- y decida lo mejor para la Universidad.
¿Es posible llevar a cabo este proceso sin influencias externas?
Las influencias externas se van a dar, se pueden estar dando ya, pero a mí me parece que la Junta de Gobierno va a actuar de una manera independiente, ¡debe actuar de una manera independiente!, la Universidad es autónoma y la autonomía significa mucho para la UNAM.
¿Cómo debe ser la relación entre la UNAM y el Presidente? ¿Con el Congreso de la Unión? ¿Con los partidos políticos?
De respeto total a la autonomía pero también de la universidad hacia afuera. La Universidad, particularmente la Rectoría, no debe relacionarse con ningún partido, ni grupúsculo político. El rector o la rectora tiene que ser absolutamente independientes y esto es fundamental, la Universidad no debe incidir en ningún partido ni permitir que ellos incidan en ella.
Con la Presidencia de la República una relación de respeto porque la UNAM hace mucho trabajo para el país: formando a los nuevos científicos, tecnólogos, humanistas; con el conocimiento que produce, que busca resolver problemas concretos del país.
La UNAM trabaja con todos los gobiernos de los estados y el federal, debe ser un trato de absoluto respeto; con la Cámara de Diputados también hemos trabajado fuertemente, no sólo por el presupuesto incluso para la formación de los propios diputados.
Respetuosa pero ¿de sana distancia o sana cercanía?
Yo creo que tiene que haber una sana distancia y en algunos casos, de sana cercanía, no es contradictorio. La Universidad tiene que estar cerca de las problemáticas nacionales, debe ser tomada en cuenta por los gobiernos para la resolución de los problemas. Debe ser obligado que se consulte a los grandes expertos de la UNAM para resolver los problemas, y abordarlos desde el conocimiento.
Esa es la sana cercanía, ¿y la sana distancia?
Nosotros somos autónomos para definir nuestros planes de trabajo, nuestros proyectos académicos, las licenciaturas, las formas de gobernarnos y en eso tiene que haber una sana distancia. No se puede meter el gobierno en la forma en la que decidimos gobernarnos, o en los proyectos en los que queremos participar o en los que no, si van contra los principios que la UNAM defiende.
De los 16 aspirantes sólo 4 son mujeres, ¿cómo lo ve?
Es un avance porque la primera vez que participé fui la única mujer, la vez pasada participaron dos mujeres, hoy somos cuatro. Eso es importante. Cuando señalo que la Universidad debe tener una mujer rectora me refiero a que ya hay muchas mujeres preparadas para dirigir la Universidad y también el país, las mujeres debemos ser tomadas en cuenta. Es clarísimo que ha habido una discriminación hacia las mujeres pero poco a poco hemos ido rompiendo esos techos de cristal, hemos llegado a puestos importantes y hemos hecho un buen trabajo. Nos podemos equivocar, como los hombres hacerlo bien o mal pero también nos deben dar la oportunidad.
En la Junta de Gobierno sólo hay cuatro mujeres, es un proceso manejado por hombres.
Sí, están en mayoría ellos y hay que cambiarlo pero también ha habido avances para las mujeres, ahora hay cuatro pero antes no había ninguna. Son avances.
¿Sí será tomada en serio la equidad de género o incluirlo en los programas de trabajo de los candidatos es un requisito de lo políticamente correcto?
No lo sé, pero creo que hay un interés en la mayoría de la gente de la UNAM en probar políticas de género. Yo misma lo he hecho en todos los puestos donde he estado. Ha ido aumentando la consideración hacia la problemática de las mujeres y de otros grupos que no lo son, pero se les trata como minorías.
Mujer y de izquierda ¿sí la dejarán llegar?
Espero que sí dada mi trayectoria, la presentación de mi plan de trabajo, dadas mis capacidades es posible que me nombren rectora.