En Colima, al menos tres organizaciones criminales se disputan el territorio por el control de tráfico de droga, siendo el puerto de Manzanillo el punto clave para el trasiego de los narcóticos y precursores químicos para su elaboración. El clima de violencia generado por dicha disputa ha alcanzado a funcionarios públicos.

 

Uno de los antecedentes de dicha situación es que a inicios de junio de este año, en la comunidad de Camotlán de Miraflores, en el puerto de Manzanillo, fue localizado el cadáver de un hombre con la cabeza cercenada junto con un mensaje firmado presuntamente por el Cártel de Sinaloa, en el cual supuestamente se atribuían el crimen y lanzaban un llamado a las autoridades para que evitarán “proteger” al grupo antagónico: el cártel Jalisco Nueva Generación.

 

Al mes de ese hecho, autoridades de la Vigésima Zona Militar confirmaron a diversos medios locales que la pugna territorial esas ambas organizaciones criminales, incluyendo al cártel de los Caballeros Templarios (antes La Familia Michoacana) era una realidad en la entidad. De acuerdo con la Administración para el Control de Droga de ese país (DEA por sus siglas en inglés), los Templarios eran considerados el grupo hegemónico en la entidad.

 

En los primeros meses de 2014, en el marco del operativo federal para desarticular las operaciones de los Caballeros Templarios en Michoacán, y en los estados colindantes donde también tienen presencia, la entonces Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, que encabezaba Alfredo Castillo Cervantes, asestó varios golpes a las finanzas de dicho grupo dando cuenta de las operaciones estratégicas que se mantienen en vilo a la fecha.

 

A través de diversos operativos conjuntos entre personal de la Marina, del Servicio de Administración Tributaria, la Pofepa, policías estatales y municipales de Colima, en marzo del año pasado se lograron asegurar 36 patios de almacenamiento ilegal de hierro en el puerto de Manzanillo, que eran utilizados por el cártel liderado por Servando Gómez La Tuta para obtener millonarias ganancias. Para mayo del mismo año, un buque con casi 11 mil toneladas de hierro fue asegurado también en el puerto de Manzanillo.

 

Ataques contra gobernadores

 

Los hechos de violencia ligados con el actuar de dichas organizaciones delictivas se han hecho evidentes incluso en los ataques en contra de gobernadores y ex mandatarios del estado. Apenas este lunes, el priista, Fernando Moreno Peña, gobernador en la entidad durante el período de 1997-2003, fue blanco de un atentado cuando desayunada en un restaurante de la capital.

 

Sobre el hecho, el gobernador, Mario Anguiano Moreno informó en conferencia de prensa que estaban “plenamente identificados” los agresores del ex mandatario, por lo que autoridades de los tres niveles de gobierno ya trabajan de forma conjunta para su pronta detención.

 

Por su parte, el coordinador de Seguridad Pública estatal, Félix Humberto Vuelvas Aguilar detalló que fue posible ubicar a al menos dos de los involucrados a través del sistema de videograbación, quienes además de ser identificados por testigos presenciales fueron reconocidos por haber cometido otros delitos en la entidad, y al hacer la confronta de las imágenes en la unidad de análisis e investigación fueron identificados. Sin embargo, indicó que aún no era posible tener un móvil del ataque.

 

En cuanto a la salud de Fernando Moreno, el secretario de salud, Agustín Lara Esqueda indicó que hasta ayer el exgobernador continuaba con “una evolución favorable, estable, sin compromiso cardiorrespiratorio, ni complicaciones en lesiones reparadas”, por lo que adelantó que este miércoles sería evaluado por el equipo quirúrgico para valorar su traslado a piso.

 

Gubernaturas manchadas de rojo

 

El clima de violencia contra mandatarios resulta algo recurrente en Colima. Hace cinco años, el 21 de noviembre 2010 fue asesinado el entonces gobernador (2005-2009), Silverio Cavazos Ceballos, cuya muerte fue reprochada por su familia en contra de Moreno Peña, pues resultó que Samuel Rodríguez Moreno, sobrino de Fernando Moreno habría estado vinculado con el crimen.

 

Según informó entonces la Procuraduría General de Justicia del estado a Samuel se le identificó como supuesto abogado de Gerardo Mendoza Chávez, señalado líder de la Familia Michoacana, quien habría presuntamente ordenado el asesinato de Cavazos.

 

El antecesor de Silverio Cavazos, el también priista Gustavo Vázquez Montes, murió a días de tomar posesión de la gubernatura. Falleció el 24 de febrero de 2005, junto con otros cuatro de sus colaboradores y los pilotos de la aeronave en la que viajaba, la cual terminó por desplomarse en Tzitzio, Michoacán. Sobre las causas del incidente las autoridades no las esclarecieron del todo, por lo que a la fecha se presume que también se trató de un atentado por obra de grupos criminales.

 

En 1973 fue electo gobernador del estado, el también militante del PRI, Antonio Barbosa Heldt, quien murió mes y medio antes de asumir el cargo, supuestamente la causa de su muerte fue suicidio debido a  “una grave enfermedad renal” que según padecía, motivo que de igual forma no tuvo claridad ante la opinión pública.