BERLÍN. El Wolfsburgo se impuso por 2-0 y con plena justicia ante el PSV Eindhoven, al que superó en todas las líneas durante la mayor parte del partido y generó permanentemente llegadas que terminaron traduciéndose en goles.
Ya el comienzo del Wolfsburgo fue agresivo y el equipo de Dieter Hecking fabricó la primera ocasión de gol a los 22 segundos de juego cuando Jeffer Bruma, en el último momento, se anticipó a Bas Dost, que se preparaba para definir aprovechando un centro desde la derecha de Joshua Guillagovi.
Las aproximaciones del Wolfsburgo no terminaron ahí. En el minuto 6 Moreno logró quitarle prácticamente de la cabeza un balón a Dos, que se preparaba a rematar y, a los pocos segundos, el meta Zoet tuvo sus dos primeras intervenciones para parar sendos disparos de Daniel Caligiuiri y de Julian Draxler.
Tras esa primera fase, el PSV logró ordenarse un poco y trató de controlar el partido. Tuvo algunas buenas aproximaciones, sobre todo a través de Narsingh por la banda derecha, y causó cierta zozobra en la zaga del Wolfsburgo a balón parado.
En una de esas situaciones a balón parado hubo una mano dentro del área de Naldo que el árbitro no vio y que le hubiera podido cambiar el curso al partido.
Sin embargo, el equipo alemán siguió siendo el que buscaba con más insistencia la portería contraria y el que fabricaba más llegadas.
En el minuto 35, Luiz Gustavo tuvo una ocasión enorme al rematar dentro del área, y en buena posición, por encima del larguero. En el 38 fue Dost quien remató desviado, tras un contragolpe, y sin reparar en que su compañero Julian Draxler estaba en mejor posición.
El PSV buscaba manejar el partido a través del control, ante lo que el Wolfsburgo se replegaba rápidamente cuando perdía la pelota.
La insistencia del Wolfburgo dio frutos cuando comenzaba el segundo tiempo, en el minuto 46, cuando Zoet sólo pudo parar a medias un remate de Guillavogui y Dos recogió el rebote para marcar sin problemas desde corta distancia y con el meta contrario todavía en el suelo.
En el minuto 57 llegó el segundo, con un remate de cabeza de Kruse a centro desde la derecha de Caligiuri. Zoet, que acababa de lucirse con una gran parada ante un disparo de Julian Draxler, esta vez no pudo hacer nada.
El Eindhoven intentó reaccionar después del segundo gol y logró poner el balón en la mitad de campo del Wolfsburgo, pero tuvo muchas dificultades para generar llegadas ante un rival ordenado en defensa.
Sólo sobre el final, en el minuto 90, hubo una gran ocasión para descontar por un penalti que se produjo por una falta del meta Diego Benaglio sobre Jürgen Locadia. No obstante, Benaglio corrigió su error al parar el disparo de Locadia.
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