AUSTIN. Carreteras cerradas, un hombre desaparecido en San Antonio y un tren sumergido en el agua son el balance de las primeras inundaciones sufridas en el estado de Texas, Estados Unidos a la espera de que lleguen los coletazos del huracán Patricia.
En Corsicana, en el noreste de Texas, un tren de mercancías de la compañía Union Pacific quedó sumergido tras una crecida repentina del nivel del agua y los equipos de emergencia se desplazaron al lugar para rescatar a sus dos trabajadores, que salieron ilesos.
“Después de activar el freno de emergencia, nuestro maquinista y nuestro ingeniero pudieron salir de la locomotora mientras el agua subía y pudieron nadar hasta un lugar elevado. Están mojados, pero bien”, explicó a la cadena WFAA Jeff DeGraff, portavoz de Union Pacific.
En San Antonio, un hombre sin hogar de 41 años está desaparecido después de precipitarse a primera hora de la mañana por un arroyo para intentar salvar a su perro, explicó a CNN un portavoz de los bomberos, Christian Bove.
En San Antonio, precisamente, a las 10:00 hora local (15.00 GMT) ya se había batido el récord de precipitaciones caídas en un solo día en la ciudad, según información del Servicio Meteorológico Nacional.
Las lluvias torrenciales también causaron el corte de diversas carreteras, como la I45 entre Dallas y Houston a la altura de Corsicana y dejaron calles anegadas en multitud de municipios y ciudades.
Durante la mañana de este sábado, además, las autoridades ordenaron la evacuación voluntaria de la Península Bolívar, en Galveston, por riesgo de inundación.
Las alertas de tornado, por su parte, se suceden en los condados de Galveston, Nueces o Brazoria.
Mientras sufre estas inundaciones, Texas está a la espera de que lleguen los coletazos del huracán Patricia, que en estos momentos se desplaza, debilitado, hacia el noreste de México.
“A medida que Patricia avance a través de México, su impacto se notará en Texas”, explicó a The Weather Channel el meteorólogo Quincy Vagell.