Se entregaron Excelencias Universales a Saúl Ancona, Carol Kolozs, David Cetina ,Casa Azul, Casa Lecanda y Jorge Escalante Bolio, debido a la excelencia que desarrollan en el mundo turístico de Mérida, ¡Bravo!

(2)La Excelencia Universal para Carol Kolozs del Rosas y XocolateEn mi reciente viaje entregué seis Premios de la Excelencia Universal (creado por René Cassin, Premio Nobel de la Paz, y el que esto escribe que le ha dado seguimiento desde 1978 a la fecha) al propio Ancona; Carol Kolozs (Rosas & Xocolate), David Cetina (La Tradición), Raúl y Pamela Bobabilla (Casa Azul), Ana Elena Méndez Lecanda (Casa Lecanda) y a Jorge Escalante Bolio (Amigo Yucatán Premium). El evento tuvo lugar en La Terraza del Rosas & Xocolate, y luego a Casa Azul, de la familia Bobadilla y, finalmente, a Casa Lecanda, de Ana Elena Méndez Lecanda.

 

Para la próxima vez, entregaremos otros premios al Museo Maya, al excelente Restaurante Oliva (familia Lecanda), donde recordé la excelente cocina italiana; alguna de las haciendas de Roberto Hernández; al pueblo de Izamal, al colonial Valladolid, etcétera. Este reconocimiento (se llamaba antes Excelencia Europea y después, Excelencia Universal, por sugerencia del entonces presidente del Consejo Nacional de Turismo, don Miguel Alemán Valdés, qepd) se entrega para preservar la calidad y excelencia en cualquier área del saber humano.

 

La capital Americana de la Cultura

Si hay una ciudad privilegiada y bella en México, esa es Mérida, Yucatán, la Capital Americana de la Cultura. En este lugar se lleva una verdadera vida familiar y con mucha paz. Existen puertos típicos, playas de aguas tranquilidas; antiguos muros que son parte de la estructura de las hermosas casas e iglesias, haciendas-hoteles como las de Roberto Hernández, otros hoteles boutique —algunos han sido declarados monumentos históricos como Casa Azul y Casa Mérida; además de otros sitios emblemáticos como Rosas & Chocolate, Casa Lecanda, restaurantes La Tradición de David Cetina y Oliva Enoteca; etcétera—, arqueología, museos, cenotes, ecoturismo y una gran cantidad de tesoros culturales e históricos. En varios viajes he hablado con Saúl Ancona, Secretario de Turismo, de todos los beneficios que Yucatán (Mérida, Progreso, Valladolid, Izamal, entre otros) le suman fama al turismo del Estado).

 

La magia de Mérida y sus alrededores

 

Como se sabe, Mérida en 3 ocasiones ha tratado de independizarse de México, sobre todo en la epoca cuándo las familias erán propietarias de grandes Haciendas con henequén y oro blanco. La mayor parte de esas familias estudiaban en los Estados Unidos y Europa. Sus principales raíces procedían de España, Líbano y otras regiones de Europa.

 

Entre esos tesoros arquitectónicos, además de monumento históricos, Casa Azul y Casa Mérida son la majestuosidad de estilo francés transformadas en hoteles-boutique. La grandiosidad de estos hoteles —Casa Azul y Casa Mérida—, es que fueron construidas en el siglo XIX y conservan su arquitectura original, es un pasaje de la historia del Yucatán porfiriano de los siglos XVIII y XIX el periodo más importante de Yucatán en general y de Mérida en particular: el auge henequenero, que le dio a la entidad riqueza y prosperidad, es la zona que vivió sus mejores días bajo la dictadura de Porfirio Díaz, cuyo poder terminó con la Revolución Mexicana de 1910.

 

Este auge permitió que la ciudad de Mérida cambiara de fisonomía con la construcción de una gran cantidad de bellas residencias para los hacendados y grandes comerciantes así como de enormes avances urbanísticos. Eran los tiempos de una bonanza económica representada con edificios como el Palacio Cantón, construido al estilo de la magnificencia de los palacios de Europa.

 

 

Yucatán, “come aparte”, ¿o no?

 

La identidad yucateca sabemos que tiene sus raíces mayas, es importante tener un encuentro con ese mundo a través del concepto que ha desarrollado el Gran Museo del Mundo Maya, aquí está el recuento de los cambios y transformaciones, de movilidad y migraciones, de la llegada de otros muchos seres humanos que fueron atraídos por un paraíso para integrarse a los grupos ya formados e iniciar una mezcla social interesante que ha dejado historia a lo largo de los años. Otro museo es el dedicado a la música yucateca.

 

Diversas haciendas, de la época de oro, se conservan gracias a la idea de adaptarlas en resorts como la Hacienda San Antonio Millet, Hacienda Xcanatún, Hacienda Misné y Hacienda Baspul, etcétera, porque cada una de ellas tiene el concepto de ser residencias de lujo, rodeadas de exuberantes jardines tropicales y paisajes. Si hablamos de la fauna, las aves de la región tienen su espacio para ofrecer, en el atardecer, un concierto sinfónico.

 

Uno debe recorrer el Paseo Montejo en el que las autoridades deben poner mayor atención porque existen edificios y hoteles que dejan mucho qué desear y que no llevan el sello que caracterizó al Paseo Montejo que siempre tuvo en sus edificios coloniales del siglo XVIII y XIX muestras de una rica arquitectura –sobre todo— francesa o colonial francesa.

 

La historia de Yucatán que fue el auge henequenero, donde sobresalían familias como los Campos-Palma (ascendientes directos de Raúl Casares G. Cantón y este columnista) y otras familias. Actualmente, algunas haciendas han querido volver a recordar aquellos tiempos.

 

Entre los personajes que vimos en Mérida: Antonio y María de Lourdes Suárez de Fritz; Cristina Leyva, a Omar, Michel y Liliana Lomar Salomón; María Elena Fritz, Aylín Salomón, Esteban Carrillo, Dunia Salomón, Lorena Lomas, Francisco González y América Ortega Rayas.

 

También estuve en el hotel San Ángel, donde Homa Aishari, Danny Suaste y Octavio Méndez me recibieron con cariño y me mostraron el hotel, su restaurantes y sus tiendas (una de ellas, de Pineda Covalin). No debemos olvidar a sus artistas plásticos, músicos (Guty Cárdenas, Ricardo Palmerín, Lalo Santamaría, Emilio Padrón, Armando Manzanero, etcétera).

 

Otros feudos culinarios que deben visitar: La Recova, La Parranda, Puerto Campeche, La Parrilla, Boston’s, y Habaneros, entre otros. Tampoco olvidar su jarana y vaquería, ciudades coloniales, las Casas Cámara, y uno de sus hospitales famoso es Star Médica, sin olvidar que el IMSS brinda excelentes servicios. Finalmente, hay recorridos por Progreso, Chichén Itzá, Uxmal, Ruta Puuc, Dzibilchaltún, varios cenotes y grutas; las playas y un largo etcétera. Y hasta la próxima, ¡abur!