BOGOTÁ. Juan Manuel Santos Calderón  aceptó la propuesta de tregua bilateral lanzada días atrás por el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), alias “Timochenko”. Desde el Palacio de Nariño, la sede del gobierno en Bogotá, Santos ha dicho que le “coge la caña” a la propuesta del líder narcoterroritsa de hacer “un regalo de Navidad a los colombianos”.

 

“Hagamos ese esfuerzo para que, de aquí al 31 de diciembre, podamos, por ejemplo, terminar el punto 5, el del fin del conflicto, y así poder decretar un cese al fuego bilateral y verificable internacionalmente a partir del primero de enero (2016)”, agregó Santos.

 

El mandatario recordó que, con ‘Timochenko’, se comprometió a firmar el acuerdo final de paz antes del 23 de marzo de 2016, pero dijo que es posible acelerar las negociaciones para no llegar hasta ese límite. “FARC y gobierno dijimos que haríamos lo posible por firmar antes del 23 de marzo, que si había voluntad política, que si había un trabajo intenso, podíamos terminar este conflicto antes. Yo quisiera hacer ese llamado, hacerle un llamado a las FARC que hagamos un esfuerzo para terminar antes”, insistió.

 

Incluso Uribe, de acuerdo… con condiciones

 

El propio ex presidente colombiano Álvaro Uribe, uno de los mayores opositores al proceso de paz, saludó hoy el anuncio afirmando que aceptaría formar una Asamblea Constituyente con miembros de las FARC, siempre y cuando no participen en ella “responsables de delitos de lesa humanidad o graves crímenes de guerra”, dijo en una entrevista con la emisora Blu Radio.

 

En el proceso de paz de La Habana que transcurre desde hace casi tres años, el gobierno colombiano y las FARC han llegado a consensos sobre desarrollo rural, participación política y solución al problema de las drogas ilícitas.  Actualmente, debaten el tema de verdad, justicia y reparación para las víctimas del conflicto armado de hace más de 50 años, en discusiones en las que se ha pactado parcialmente el espinoso asunto de justicia transicional para quienes dejen las armas y el de la búsqueda de los miles de desaparecidos en la conflagración interna.

 

Mientras tanto, la lucha sobre el terreno contra la guerrilla no se detiene. El Ministerio de Defensa señaló hoy, por ejemplo, que cuatro integrantes del frente 14 de las FARC murieron en una operación militar efectuada en Cartagena del Chairá, en el selvático departamento de Caquetá, al sur del país.