Luego del enfrentamiento el pasado miércoles entre normalistas y fuerzas policiales, ayer permanecían ocho estudiantes hospitalizados.

 

De acuerdo con Vidulfo Rosales Sierra, abogado de los normalistas, dos de ellos tienen fracturas en los brazos, uno más de ellos en el rostro, mientras que Juan Castro Rodríguez presentó traumatismo craneoencefálico en grado uno, por lo que su estado se reporta como grave.

 

En una entrevista con La Jornada, el activista del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan añadió que otros normalistas tienen contusiones en el cuello y golpes en la columna vertebral.

 

Según el abogado, los jóvenes estuvieron de pie en los pasillos del hospital debido a la falta de camas, por lo que exigió al gobernador Héctor Astudillo que los lesionados sean trasladados a centros hospitalarios privados.

 

El enfrentamiento del miércoles se presentó cuando un grupo de normalistas intentaban llevarse una pipa de combustible, por lo que las fuerzas locales y federales invervinieron.

 

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública local, los estudiantes agredieron a los policías locales, incluso lanzaron una granada de fragmentación contra los uniformados.

 

Pedro Almazán, secretario de seguridad pública del estado justificó el uso de gases lacrimógenos ya que los estudiantes agredieron con piedras.

 

Por parte de los uniformados, se reportó que el agente Elvis Hernández tenía una herida en una pierna, aunque no corría peligro su vida.