PARÍS. La promesa del presidente de Francia, François Hollande, de declarar una guerra implacable contra el terrorismo mediante una única coalición contra el Estado Islámico comenzó a tomar forma a través de intercambios diplomáticos entre París, Washington, Bruselas y Moscú, mientras intensificó por tercer día consecutivo bombardeos sobre Al Raqa, bastión de los yihadistas en Siria.
Rusia, que también bombardea al Estado Islámico, confirmó que la explosión el pasado 31 de octubre del Airbus ruso en Egipto con 224 personas a bordo se debió a un atentado. Putin salió al paso anunciando que Moscú se unirá a la alianza de París y Washington contra el EI, ordenó que se localice y liquide a todos los responsables de ese atentado y lanzó un ataque masivo con bombarderos estratégicos y misiles de crucero contra las posiciones de ese grupo terrorista.
En una reunión telefónica mantenida con Hollande, los dos dirigentes acordaron coordinar sus acciones militares en Siria y abordar en detalle esa cooperación bilateral contra el terrorismo en su encuentro de la semana próxima. Hollande se reunirá en Washington con su homólogo estadunidense, Barack Obama, solo dos días antes de que el jefe del Estado francés se entreviste en Moscú con su homólogo ruso.
A los socios de la OTAN, Hollande aún no ha solicitado apoyo militar. Pero Jean-Yves Le Drian, el ministro de Defensa francés, invocó por primera vez en la historia de la UE el artículo 42.7 del Tratado de la UE y pide a los demás países miembros “toda la ayuda y el apoyo posibles”, debido a “un ataque al territorio soberano” de Francia. Ese paso no fue dado ni por el gobierno de España luego de los atentados de Madrid en 2004, con casi 200 muertos, ni por el de Gran Bretaña luego de los atentados de Londres en 2005.
El artículo 42.7 se corresponde a nivel de la UE aproximadamente con el artículo 5 del Pacto de la OTAN. Dice que “si un Estado miembro es objeto de una agresión armada en su territorio, los demás Estados miembros le deberán ayuda y asistencia con todos los medios a su alcance, de conformidad con el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”.
Los Veintiocho respaldaron de forma “unánime” la petición de Francia y acordarán bilateralmente con ese país qué aportaciones pueden hacer a su acción contra el Estado Islámico o en operaciones internacionales. Fuentes europeas señalaron que las aportaciones pueden ser en el ámbito militar, la inteligencia o incluso humanitario.